SALUD
Hematología: De qué forma afecta el Covid-19 a la sangre
Según la Organización Mundial de la Salud, los corononavirus son una extensa familia de virus que pueden causar enfermedades en humanos y animales. El descubierto más recientemente causa la enfermedad por coronavirus COVID-19, causante de la pandemia que estamos viviendo desde principios de este 2020.
La información que ya prácticamente todos manejamos es que el COVID-19 es una enfermedad respiratoria aguda, a veces grave. También manejamos cuáles son las vías de contagio, así como las medidas de prevención que debemos tomar en cuenta para evitarlo. Pero ¿qué tanto sabemos sobre cómo afecta el COVID-19 algunos órganos o células del cuerpo?
“Los síntomas más graves de esta enfermedad se presentan en las personas con sistema inmunológico más débil, como los ancianos, y en personas que padecen enfermedades crónicas, como las que afectan el corazón, pulmones, hígado, riñón, sistema sanguíneo, metabólico (diabetes) o algún tipo de cáncer”, explica la doctora Evelin Mena, hematóloga internista, especialista en la clínica Abreu.
En el campo de la hematología -la especialidad que estudia la sangre y sus enfermedades-, la mayoría de los pacientes asistidos contemplan un diagnóstico que afecta las células de manera directa o indirecta. La doctora Mena cuenta que algunas de las afecciones de este virus en esta área son anemias moderadas o severas, hemoglobinopatías como falcemia, talasemias, desórdenes hemorrágicos o de coagulación sanguínea.
Además, algunos pacientes ancianos se han presentado con mielodisplasias, así como un grado variable de inmunosupresión “sobre todo aquellos diagnosticados con malignidades de la sangre o con linfomas que estén sometidos a quimioterapia de manera activa”, afirma.
En estos casos, los pacientes “deben incorporar hábitos saludables, como, por ejemplo, en los pacientes falcémicos, con la finalidad de evitar precipitación de crisis de dolor o de hemólisis que puedan requerir ingresos médicos, recomendamos en específico ingerir abundantes líquidos, preferiblemente agua, alimentos ricos en antioxidantes, incluir además suplementos con L-glutamina y L-arginina, evitar cambios abruptos de temperatura como el calor, el frío y el cansancio extremo”, concluye .