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Ideas eco para decorar el hogar con poco presupuesto

Terminadas las fiestas, toda poner orden en la casa. Aprovecha y dale vida tú misma sin gastar demasiado

Año nuevo, ¿espacio nuevo? Sí, por qué no. La “olla económica” de principio de año no mengua la imaginación de los amantes de la decoración y las manualidades ni los deseos de renovar los rincones de la casa para disfrutarlos y lucirlos como nuevos. ¿Cómo hacerlo sin gastar de más? A veces basta con un cambio de color en las paredes; otras, con incorporar pequeños elementos o modificaciones que no requieren de grandes inversiones. Lo que sea que decidas, dale preferencia a reutilizar objetos y materiales que llevan años guardados en el clóset. ¿Comenzamos?

Cortinas y sábanas viejas guardadas que no piensas utilizar de nuevo? Úsalas para revestir los cojines o para elaborar cuadros y tapices para las paredes. Tendrás objetos coloridos y únicos sin gastar un centavo.

Dale un chance al palé. Las tablas finas ensambladas son tan versátiles que te llegarán a la mente un montón de ideas para utilizarlas.

Nada de objetos pequeños, papeles, folletos, recibos o documentos regados por ahí. Si no quieres gastar en repisas o cómodas, pinta de colores alegres esos tarros que no encuentran sitio en el patio y ya está!

El aire vintage y romántico que hace acogedor cualquier ambiente lo consigues dando protagonismo a elementos antiguos, como esta maleta convertida en el tope de una pequeña mesa.

Te gusta la horticultura urbana pero piensas que tu casa es muy pequeña para plantar muchas de las especies aromáticas que deseas usar en la cocina? Un estante colgante o pegado a la pared te resuelven el problema. También colocar las macetas directamente en la pared o sobre un marco de madera, formando una especie de jardín vertical. Demasiado verde? Agrega ornamentales!

No te gustan las pinturas ni las fotos de paisajes, pero sabes que a esa pared le falta algo. Haz tus propios cuadros usando recortes de cortinas y sábanas usadas, hojas verdes enmarcadas en un fondo blanco o pellizas. Hasta los dibujos de los pequeños de la casa se verán bien.

Elimina uno o dos gabinetes cerrados de la cocina (o la puerta, en todo caso) y sustitúyelos por tablas o estantes abiertos. Un cambio radical!

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