Enfermedad pélvica inflamatoria

La enfermedad pélvica inflamatoria es la infección e inflamación del útero, trompas y ovarios debido a bacterias que ascienden desde la vagina y el cuello uterino.

Los dos agentes más comunes son la Chlamydia y la Neisseria, ambas consideradas las principales enfermedades de transmisión sexual, aunque puede ser causada por Gardnerella, Estafilococos, Estreptococos, entre otros.

Síntomas

El síntoma más común es dolor abdominal y pélvico bajo, generalmente a ambos lados de la pelvis, asociado a secreción transvaginal maloliente. También puede haber sangrado uterino anormal, fiebre, malestar general, dolor durante las relaciones sexuales, etcétera.

Factores de riesgo

Los factores de riesgo para su adquisición son inicio de relaciones sexuales a temprana edad, múltiples parejas sexuales, relaciones sexuales sin preservativos, uso de duchas vaginales, entre otros.

Diagnóstico

El diagnóstico se hace por historia clínica, cultivo de secreción vaginal, sonografía pélvica, histerosalpingografía y laparoscopía.

Las complicaciones relacionadas a la EPI vienen dadas sobre todo por el daño causado a las trompas, el cual muchas veces es irreversible, provocando infertilidad y aumento en el riesgo de embarazo ectópico.

Tratamiento

El tratamiento es a base de antibióticos, aunque a veces puede ser necesaria la cirugía para drenar abscesos pélvicos y lavar el peritoneo. Se estima que cada año aparecen alrededor de un millón de nuevos casos de EPI a escala mundial.