La Vida

DESTINO

En el Viejo San Juan. ¿Dónde almorzar?

Interior del restaurante Sophia’s en el Viejo San Juan. FOTO CARMENCHU BRUSILOFF

Carmenchu BrusíloffSanto Domingo, RD

En la cercanía del antiguo Teatro Tapia, en el Viejo San Juan, nos atrapa la hora del mediodía. “Tengo hambre, ¿dónde vamos a almorzar?’, pregunto a mi hija Carmen, que vive en Puerto Rico. De haber sitios los hay, más no estoy en ánimos de dar bandazos de aquí para allá. Y justo a nuestra vista en una esquina descubrimos Sophia’s. (En la carta lo escriben en español: Sofia’s). La fachada en modo alguno es atractiva: imágenes de platos que dan la idea de cafetería. Mi deseo es comer bien, aunque a precio asequible. En la otra fachada, el entorno resulta agradable con mesitas al aire libre.

Antes de entrar estudiamos la carta que cuelga en el muro. ¡Uao! Hay platos de US$35.00. Se pasa de nuestro presupuesto. Aún así, sigo leyendo. ¡Eureka! En la parte inferior, una línea con llamativas letras rojas anuncia Lunch Specials. Con letra más pequeña especifica su oferta de martes a viernes, entre 11:30 de la mañana y 4:00 de la tarde. ¡Vamos a aprovecharlo!

En el comedor, de ambiente minimalista, contrastan las mesas de blanco tope con negras patas y los colores negro y azul de las sillas, mientras por el altavoz se deja oír una hermosa pero vieja canción: ‘Dancing cheek to cheek...’ En las paredes, gigantescas imágenes de actores como Sylvester Stallone son parte de un decorado que se complementa con los tonos diversos de azul de las camisas y chalecos de los camareros.

Pedimos la carta del ‘brunch special’. No son muchos los platos a escoger, pero sí suficientes. Carmen solo quiere Eggplant Moussaka (Musaka de berenjena), (US$11.99). ¡Súper deliciosa! Yo, en cambio, pido Petto di Pollo Parmesano (Pechuga de pollo a la Parmesana), con pasta penne con ajo y aceite (US$12.99). Me encanta, con su gruesa capa de queso encima. De bebida, un jugo de naranja (US$5.50). Supimos elegir.

“¿Todo bien?”, pregunta atento el camarero. “Sí. Estamos llenas!”, respondo aún sin terminar la comida. Al poco rato trae la cuenta. “¿Y quién le dijo que no queremos postre?”, le cuestiono riendo. “Ah... como dijeron que estaban llenas...”, - “Pero no para el postre”, acoto. “Me apetece ‘Créme brulée’”. Reacciona un tanto circunspecto. “Deje ver si hay. Creo que se terminó”. Se marcha a averiguar y regresa contento. “Sí, hay. Lo encargué”. Carmen se inclina por Tiramisú, que viene servido en copa. Mi postre, en un plato blanco ovalado. ¡Ricoo! Crocante por encima, tal como lo esperaba.

La cuenta El ‘brunch special’ en Sophia’s, se ofrece de martes a viernes al mediodía. En abril de este año, el de Carmen y mío nos costó US$49.61, incluyendo City Tax y P.R. Tax. La propina se da aparte.

Dirección Sophia’s está ubicado en la calle Fortaleza 364, frente a la plaza donde se levanta la estatua a Cristóbal Colón, en el Viejo San Juan.