La Vida

Metodología

Aprendizaje basado en dinámicas

Las actividades involucran música, movimiento y sobre todo diversión. ISTOCK

Laura Ortiz GüichardoSanto Domingo, RD

El aprendizaje experiencial es una metodología por la que muchos facilitadores en el área de trabajo en equipo han optado, ya que gracias a esta el individuo puede construir su propio conocimiento y desarrollar habilidades a través de la experiencia.

En el caso del ‘coach’ Ricardo Cañas, al ver los beneficios que este tipo de aprendizaje ofrece, decidió certificarse en el área, para años más tarde especializarse específicamente en la metodología de aprendizaje dinámico acelerado (ADA).

Esta técnica, como su nombre lo indica, consiste en un aprendizaje basado en vivencias y dinámicas, que se hace llamar acelerado porque en un mismo juego o actividad entran varias competencias conductuales como la comunicación efectiva, el liderazgo, el trabajo en equipo y el compañerismo.

Cada una de esas diná- micas es especialmente diseñada para cumplir diferentes propósitos y a veces incluso puede llegar a ser riesgosa y retadora, con la intención de que se trabaje en equipo para lograr el fin determinado. Así lo describe Cañas, quien además cita que las actividades pueden ser muy variadas y distintas, pero que por lo general siempre involucran música, movimiento y sobre todo diversión, porque “cuando una persona se divierte baja la guardia y se muestra tal cual es”.

De acuerdo con el experto en transformación de equipos, los beneficios del aprendizaje dinámico acelerado no solo se limitan al trabajo en grupo o a ambientes empresariales, sino que también ayuda a crecer de manera individual.

En ese sentido expresa: “Todo el mundo quiere lograr metas en la vida o ser líder en algún momento.

Las mismas cosas que pueden ser de beneficio para desarrollarse en una empresa también lo son para la vida personal de cada quien”.

Labor en el país Ricardo Cañas, quien también es conferencista, desarrolla actividades en el país que ayudan a fomentar el liderazgo y el emprendimiento, de la mano con Acrópolis Center.

Pese a que Cañas es salvadoreño, el hecho de tener más de 30 años en República Dominicana le ha permitido darse cuenta de que en el país hay un gran interés por superarse en el ámbito personal y por conocer la manera adecuada para lograrlo.

“Una de las cosas más fascinantes es ver la gran aceptación que tienen los eventos que realizamos, lo que indica que hay sed de aprender porque la gente va porque quiere, no por obligación”, relata.