Europa

SARAMPIÓN

Las políticas de vacunación contra el sarampión podrían ser insuficientes

Las actuales políticas de vacunación podrían ser insuficientes para eliminar el sarampión y prevenir un resurgimiento futuro en Australia, Irlanda, Italia, el Reino Unido y Estados Unidos, según alerta un informe divulgado el viernes.

El documento, publicado por el BMC Medicine, indica que a fin de lograr y mantener con éxito la erradicación de la enfermedad en los citados países de medio a largo plazo, podría ser necesario implementar más medidas de inmunización, específicas para cada país, además de aplicar las estrategias actuales.

La eliminación del sarampión se ha definido como la ausencia de la transmisión endémica de la enfermedad en una región u otra área geográfica durante un periodo de doce meses o mayor.

Un equipo de investigadores de la Fundación Bruno Kessler y la Universidad italiana de Bocconi emplearon un modelo de ordenador para simular la evolución de la inmunidad del sarampión entre 2018 y 2050 en siete países: Australia, Irlanda, Italia, Singapur, Corea del Sur, Reino Unido y EE.UU.

Los autores centraron sus análisis en países que aplicaban como rutina un programa de dos dosis de vacunas contra el sarampión y tenían una alta tasa de implicación de niños de la escuela primaria, pero con demografías e historiales de vacunación diferentes.

Con ello pretendían evaluar el efecto de posibles ajustes a las existentes estrategias de inmunización, así como estimar la proporción de personas que podrían continuar siendo susceptibles de contraer el sarampión con el tiempo en países de alta renta.

Las proyecciones hasta 2050 sugieren que si las actuales políticas de vacunación continúan invariables, la proporción de la población susceptible de contraer la enfermedad solo continuaría por debajo del 7,5 % en Singapur y Corea del Sur, dos países que ya contaban en el pasado con una gran cobertura de tratamiento.

De acuerdo con estudios previos, la proporción de habitantes que no tiene inmunidad -y es, por tanto, de máxima susceptibilidad- ha de ser del 7,5 % o menor para que el sarampión sea eliminado.

En 2018, el porcentaje de personas susceptibles a la dolencia en los países bajo estudio oscilaba desde el 3,7 % en el Reino Unido al 9,3 % en Italia, el único país donde la proporción era mayor del 7,5 %.

El documento indica que en Australia, Irlanda, Reino Unido y Estados Unidos, los programas rutinarios de vacunas necesitarían cubrir continuamente a más del 95 % de la población para mantener la proporción de individuos susceptibles por debajo del 7,5 % hasta 2050.

"En los últimos años, hemos visto un resurgimiento de casos de sarampión incluso en países donde, según las pautas de la Organización Mundial de la Salud (OMS), la eliminación debería haberse ya logrado", indicó el autor principal del informe, Filippo Trentini.

Ese incremento se debe, agregó, "a los niveles de cobertura de vacunación no óptimos".

En Italia, donde las tasas de incidentes de sarampión figuran entre las más elevadas, los gobiernos han hecho que la vacunación contra esa enfermedad sea obligatoria en niños antes de que empiecen la enseñanza primaria.

Según la publicación, los autores investigaron el potencial de esta y otras políticas para reforzar las tasas de inmunización en siete países de renta alta.

"Nuestros resultados sugieren que la mayoría de países estudiados se beneficiarían de la introducción de vacunación obligatoria en el colegio, además de los actuales programas de inmunización", observó, por su parte, Stefano Merler, otro de los autores.

Merler añadió que, "en particular", se encontró que "esta estrategia permitiría que el Reino Unido, Irlanda y Estados Unidos alcancen niveles de inmunidad estables en las próximas décadas".

Ello implica, dijo, "que una proporción significativamente alta de individuos inmunes a la enfermedad evitarán brotes futuros. Para ser efectiva, la vacunación obligatoria en el colegio tendría que cubrir más del 40 % de la población".

En Italia, la fracción de individuos susceptibles antes de 2050 se proyecta en el 10 %, incluso si la cobertura de los programas de vacunación rutinarios alcanza el 100 %, y podría ser necesario aplicar estrategias adicionales dirigidas tanto a escolares de primaria y a adultos a fin de lograr la eliminación.