Un accesorio para cualquier ocasión y estilo de vida

El sombrero se ha adaptado a los distintos estilos de vida y clases sociales con el paso del tiempo; y hoy día, una vestimenta informal, de jeans, va perfectamente con una gorra tipo Fédora o tipo ‘player’.

Pero no siempre fue así, en los 40 y 50 del siglo pasado, el sombrero era parte del vestuario y podía llevarse grande o tipo tocado.

En la actualidad es apropiado lucir en una boda de día en la iglesia, un sombrero con flores, plumas y otras fantasías, afirma la asesora de moda Rodhie Lamour, quien advierte que este accesorio puede ser formal o casual, según el material en que esté confeccionado.

Así, es posible adaptar la pamela de alas anchas usada en la playa a eventos formales, con un material de lujo y decoración propia para la ocasión, sostiene Lamour.

Destaca que el sombrero se debe de elegir desde que se tiene el concepto del ‘outfit’ completo, para que sea un aliado en la comunicación personal. Añade que el peinado debe estar acorde con el tipo de cuello de la vestimenta.

“Si lleva el sombrero elaborado, el peinado debe de ser simple, al igual el cuello de la prenda de vestir superior sea una chaqueta, blusa o vestido, no deben de chocar con el sombrero. También influye la corpulencia y el tamaño de la persona, para que el volumen y la amplitud del sombrero sean favorecedores”.

A más elaborada la ropa, más sencillo debe ser el sombrero y viceversa, para lograr un balance visual del ‘outfit’.

Se simplica su uso En los años 60 se simplificó el uso del sombrero, luego de tener normas estrictas y complejas para llevarlo, pero fue Coco Channel quien a principios de siglo empezó a crear sombreros que se adaptaban a esas nuevas necesidades de la mujer de la época, pasando el diseño de funcional a ser un objeto ícono de la moda, no solo para protección en invierno sino para dar estilo a su ‘look’.

Más adelante Estados Unidos le dio su bienvenida al sombrero como forma de distinción de las estrellas de Hollywood: Audrey Hepburn, Greta Garbo, Grace Kelly y Jackie Kennedy fueron las encargadas de reivindicar su uso con el ‘pillbox’, un sombrero pequeño y simple.

Hoy día sigue siendo, en su expresión más elegante, una pieza de pertenencia aristócrata o para los que simpatizan con esta clase y la imitan en su estilo.

Para dar valor a un sombrero varios principios deben de tomarse en cuenta para lucirlo con glamur, señala Lamour, entre estos, elegirlos acorde al tipo de rostro, pues alguien con rostro alargado debe optar por un sombrero pequeño, que no se eleve mucho.

Indica que es importante la posición adecuada y la fijación del sombrero, tanto para la elegancia como para la seguridad de quien lo lleva. Y afirma que, ligeramente inclinado de un lado, en ciertos modelos agrega un ‘plus’ a la postura y proyección.

Subraya que en las actividades de día, el sombrero de una dama no se quita, pues corre el riesgo de quedar despeinada, por lo que debe mantenerlo puesto.

Países de clima cálido Lamour recomienda usar sombrero en países de clima cálido, como República Dominicana, y destaca que es importante usar aquellos cuyos materiales no den más calor, ya que ciertos materiales de sombreros además de glamur son concebidos para dar calor.

“Por lo tanto, recomendamos los materiales adaptados a las temperaturas altas”, expresa.

Y para la playa señala que lo mejor es usar sombreros de alas anchas, que protegen del sol del Caribe.

¿Cuándo usarlo? ¿De día, de noche, en un almuerzo...?

Los sombreros, en el caso de la mujer, se llevan de día en múltiples circunstancias, también donde ciertos protocolos los pueden exigir.

Una viuda lleva un sombrero con velo negro según la tradición, en símbolo de su luto. Es una norma que se observa en varios países, como Haití, entre otros.