PROPÓSITOS
Principios de vida, más que simples metas
Cada nuevo año estamos prestos a tomar las metas como una parte más de las mismas festividades y esto, aunque debería ser una tarea reflexiva, se convierte en una rutina que termina casi siempre igual: un listado de cosas por hacer o de objetivos profesionales y personales por lograr.
César Cordero, representante de Dale Carnegie en el país, comenta que esta lista, con suerte, se vuelve a leer o se retoma para realmente darle seguimiento y todo al final queda en los mismos deseos de bajar de peso, mejorar los ingresos, cambiar de trabajo, adquirir un nuevo vehículo, dejar tal o cual hábito, conseguir pareja... y así esto se convierte en más de lo mismo.
“Hoy cualquier persona que quiera iniciar un proceso de crecimiento, cambios y transformación real, lograr establecer metas y objetivos claros y específicos, debe considerar salir de la rutina que se toma todos los inicios de año. Vamos a pensar diferente y a establecer un plan diferente apoyándonos con las personas que están a nuestro alrededor, no solo en nuestro mundo laboral profesional o de negocios, sino también en nuestro ambiente social, con nuestra familia y con nuestros futuros amigos”, sugiere Cordero.
UN REPASO A TUS LOGROS Y RETOS
El cierre de un ciclo y el inicio de otro es ideal para tomar un momento y ver qué tanto avanzamos en los meses previos, qué logramos, qué realizamos de lo que nos podamos sentir satisfechos, y para hacer una lista, sin crítica y sin parcialidad, de los eventos relevantes de los que fuimos parte, tanto en lo laboral como en lo personal. Después de hacer esta lista, podemos proyectar un nuevo ciclo más efectivo y exitoso, considerando objetivos puntuales que nos reten y lleven a cambios de actitud ante los desafíos que vamos a enfrentar.