ORGASMÓMETRO
Crean herramienta para medir la intensidad del orgasmo femenino
Un científico italiano desarrolló una herramienta psicométrica para medir la intensidad del orgasmo femenino, a través de la cantidad de placer que este les genera a las féminas durante el coito, la masturbación y otros actos sexuales.
La herramienta fue desarrollada durante un estudio, en el que también se concluyó con que el dolor y el placer son sensaciones muy parecidas, puesto que ambos estimulan partes parecidas.
Añadió que si la estimulación del clítoris no es correcta, el placer es fácilmente transformado en dolor.
La herramienta denominada “Orgasmómetro”, fue creada por el científico italiano Emmanuele Jannini, profesor de endocrinología y sexología médica de la Universidad de Roma Tor Vergata, además de un equipo de científicos.
"Esta es la primera vez que se mide el orgasmo femenino a través de una herramienta psicométrica validada", le explica Jannini al ser entrevistado para BBC Mundo.
El profesor también confirmó que con la correlación con la masturbación explica que no es verdad que la sexualidad femenina depende exclusivamente de la habilidad del hombre.
La investigación reiteró además que las relaciones sexuales no tienen como único propósito la reproducción.
La investigación fue publicada el pasado 29 de agosto, con el nombre "Validación de una escala visual análoga para medir la percepción subjetiva de la intensidad orgásmica en las mujeres: el orgasmómetro-F", a través de un artículo en la revista científica PLOS ONE.
Para la realización del estudio participaron 526 mujeres, de ellas, 112 son pacientes de una clínica de sexualidad que sufren algún tipo de disfuncionalidad sexual, y las otras 414, que no presentaban ningún problema de índole sexual, fueron inscritas a través de la web.
Indicó que usaron la misma escala con la que se mide el dolor, porque el placer no sólo también es subjetivo, sino porque estimula partes parecidas y cercanas del cerebro con mecanismos similares, al punto de que en ocasiones el cerebro de algunas personas les cuesta distinguir, decidir, si una determinada sensación fue dolorosa o placentera, argumentó Jannini.