¿Qué no debo regalarle a mi hijo?

En enero llega la celebración más esperada por los pequeños de la casa: el Día de los Reyes Magos.

Esta festividad, que se lleva a cabo cada 6 de enero conmemora la visita que hicieran Melchor, Gaspar y Baltazar al niño Jesús varios días después de su nacimiento, con regalos para él.

El encanto que tiene este día para los niños consiste en el hecho de recibir juguetes nuevos de parte de sus seres queridos.

Aunque quizás un juego se tome como algo insignificante lo cierto es que por simple que sea este artefacto puede traer consecuencias en la vida futura de los infantes.

De acuerdo con la psicóloga Roxanna Marte, a la hora de elegir un juguete para regalar a un niño hay varios aspectos a tomar en cuenta la edad, tamaño y la habilidad.

La experta dice que es de gran importancia identificar los juguetes que hacen feliz tanto al niño al usarlo como a los padres al observarlo jugar, sin que estos dejen de ser educativos y procuren su desarrollo armonioso.

Hay ciertos tipos de juguetes que pueden causar daños psicológicos como ansiedad, adicción, comportamiento agresivo y disminución de las relaciones personales en los niños. Es por esto que se debe tener cierta precaución cuando se va a seleccionar un regalo.

Juguetes que se deben evitar

Roxanna Marte explica que los juegos de pistola, o juguetes que disparan objetos en el aire, son algunos de los que no deben formar parte de la lista de obsequios por motivo al Día de los Reyes Magos. Estos, además de que pueden causar daños en los ojos, es posible que provoquen en ellos una actitud violenta frente a ciertas situaciones que la vida les presente en el futuro.

“Los niños aprenden jugando y luego, cuando enfrentan un inconveniente, puede que tomen como primera opción la pistola, y tristemente surja un efecto de serias y graves consecuencias, inclusive la muerte”, dice la experta.

También dice que en la actualidad los padres entregan el celular a sus hijos “como si fuera un simple juguete”, acción que califica como incorrecta, ya que este tiene múltiples uso y un niño no cuenta con la edad ni madurez suficiente para asumir la responsabilidad que representa el mismo.

Espadas, juguetes con cuerdas o que contengan tóxicos discretamente, son otros que deben evitarse, ya que por el material que los compone pueden causar daños graves en los pequeños.

Una recomendación que da la psicóloga es fomentar el juego en equipo, ya que a través de este se logra desarrollar la paciencia, a esperar su turno, el compartir, el respeto, la obediencia, al seguir instrucciones y aprender a socializar de manera sana, aprendiendo que no siempre se gana.

“Motivo a los padres a recordar el principio bíblico que dice, instruye al niño en su camino y aun cuando fuere viejo no se aportará de él”, dice.

Estamos llamados a educar a nuestros hijos, para fomentar principios y valores que le ayudarán a ser seres humanos con amor a Dios, amor a sí mismo y amor a su prójimo. ¡A jugar con alegría!”, culmina Marte.