LA CUARTILLA
Feliz Navidad
Las festividades navideñas nos llevan a la nostalgia. Siempre. En este período uno recuerda... los recuerdos llegan untados de ese sabor de infancia cuando todos éramos habitantes de un mundo mejor, sin las preocupaciones propias de la adultez, sin los compromisos que se tornan cada vez más exigentes y hoscos. Pero lo especial de esta época era la ilusión previa. La gente saboreaba desde finales de septiembre esa expectativa: por ahí viene la Navidad, decía. Pronto estaremos de fiesta. Y se sentía en el ambiente, y ya desde octubre había una atmósfera festiva. Creo, sin lugar a dudas, que se disfrutaba mucho la expectativa, se caldeaba la ilusión y, cuando llegaba, había una explosión de alegría y de colores en las calles. Eran otros tiempos. Es por eso que ver la Navidad desde la nostalgia a veces ayuda. Nosotros, la gente de mi generación, éramos niños que dejábamos cigarrillos, yerba del patio y un refresco rojo a los reyes magos, nos acostábamos temprano, henchidos con la ilusión de que ese espíritu benigno vendría en la madrugada, se llevaría sus cigarrillos, su refresco rojo y su yerba del jardín, y dejaría debajo de la cama nuestras bicicletas y juegos, porque entonces el Día de Reyes también formaba parte de esa Navidad. Es la nostalgia. Es la evocación. De todas maneras, hoy, renovemos la esperanza, por nosotros, por nuestros hijos, por nuestro país. ¡Feliz Navidad!