La Vida

Prevención

Educación ciudadana contra ruidos

La contaminación auditiva es una realidad, como también lo es el trabajo que se realiza para solucionar el problema. La muestra es la campaña constante y las acciones que desarrolla el Departamento Antirruidos de la Policía Nacional para no solo controlar la situación, sino erradicarla. El coronel José Luis Montás, encargado de Antirruidos, informa que, por entender que se trata de un asunto que compromete la salud y la paz social, cada vez es mayor el esfuerzo que hacen las autoridades para silenciar la ciudad. “Aunque nos mantenemos trabajando durante todo el año, en esta época de Navidad, por el ambiente festivo que se da, hemos reforzado el trabajo que hacemos para que la ciudadanía disfrute de unas Pascuas tranquilas; claro, sin dejar de divertirse con el entusiasmo que caracteriza al dominicano”, expresa. Informa que un equipo de agentes está a disposición de la ciudadanía para controlar los ruidos producidos por los aparatos de música tanto en las casas, calles o vehículos. “Estamos comprometidos con la tranquilidad de los dominicanos y no vamos a tolerar la ocurrencia de sonidos que sobrepasen los decibeles establecidos por las autoridades”, apunta Montás. Destaca que la Policía Nacional a través del Departamento Antirruidos, ha impulsado campañas de orientación sobre los daños que causan los ruidos y que, favorablemente, en los últimos tiempos el resultado ha sido el mejor, ya que se han empeñado en dar respuestas a las denuncias de quienes llaman a la entidad para dar a conocer las molestias causadas por establecimientos públicos o vecinos. Admite que por asuntos de ruidos, en el país se han registrado casos de violencia, los cuales se han reducido con las acciones que ejecuta el Departamento en pro de la salud y tranquilidad de la población.

(+)EXHORTACIONES PARA MEJOR CONVIVENCIADeber: Todo ciudadano debe respetar el entorno y la tranquilidad de los demás. Derecho: A vivir en un lugar seguro y libre de contaminación. Medida: Se quitan las bocinas del transgresor y, si es necesario, se le cita para darle orientación ciudadana. Consecuencia: En el peor de los casos, quien violente la ley puede enfrentar cargos con la justicia.

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