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Adorno

Arbolitos navideños para ver y degustar

Los arbolitos dicen presente también en la mesa de Navidad. Una hermosa forma de decorar su mesa acorde con la época es elaborar arbolitos con productos que, luego de concluida la velada, puedan ser ingeridos. La celebración se alegra con el colorido de arbolitos hechos con dulces (caramelos, gomitas, bolones, suspiritos o malvaviscos), frutas (manzanas pequeñas, uvas o fresas), frutos secos, picaderas (aceitunas o cuadritos de jamón y queso) o galletas de jengibre. Para armar un arbolito comestible, la diseñadora de interiores Maritza Báez Acta sugiere empezar por adquirir o hacer un cono de fon o “hielo seco”. A fin de que el comestible no vaya adherido directamente a este material, forre el cono con una lámina de plástico de cocina. Con ayuda de palillos o palitos para pinchos, puede fijar en torno al cono productos blandos como frutas, picaderas o gomitas. Báez Acta advierte, no obstante, que los palillos conllevan cierto peligro en hogares donde hay niños pequeños. Por eso sugiere también la posibilidad de pegar los caramelos o frutos con fondant u tipo de pasta usada en pastelería. El proceso para armar un arbolitos de galletas es más simple: elabore o compre galletas de distintos tamaños y colóquelas unas sobre otras, las más grandes en la base y terminando en el tope con la más pequeña. Los arbolitos comestibles adornan las mesas en los bufés y en otros grandes eventos, pero también en los banquetes caseros de Nochebuena y Año Viejo. En este caso se pueden disponer como centros de mesa (siempre y cuando no obstaculicen la visibilidad) o, en dimensiones todavía más pequeñas, como un detalle individual para cada comensal. “Tú puedes poner un centro hasta con diez arbolitos pequeños, si quieres”, recomienda Báez Acta para un efecto más espectacular. Este tipo de detalle cumple una doble función: decorativa y alimenticia. Y quien recibe una invitación para cenar o almorzar en casa de unos amigos o parientes bien puede elaborar un arbolito comestible y ofrecerlo a sus anfitriones como regalo. Proteja su pequeña obra de arteSi en su hogar enfrentan problemas de plagas como hormigas o moscas, tal vez dude si colocar o no un arbolito comestible como decoración. Para proteger su pequeña obra de arte y poder degustarla, pruebe a rociar poco de insecticida en las patas de las mesas varias horas antes de poner la mesa, así ahuyentará las hormigas. Si lo prefiere, recubra el árbol con una fina lámina de plástico transparente y no tendrá problemas con las moscas.

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