6 MILLONES DE DóLARES
Agricultores reclaman Punta Catalina les pague por daños causados a sus cultivos
Julio Cesar Fortuna y Sixto Paulino, en representación de los agricultores, explicaron que la producción de al menos 25 especies de cultivo ha registrado una pérdida de más del 50 por ciento en las 2,781.5 tareas en las que laboraban, cercanas a la central.
Una comitiva de agricultores de Nizao, Don Gregorio, Sabana Uvero y Santana ha reclamado 6 millones de dolares por los daños que la Central Termoeléctrica Punta Catalina ha causado a sus cultivos desde el año 2019.
Julio Cesar Fortuna y Sixto Paulino, en representación de los agricultores, explicaron que la producción de al menos 25 especies de cultivo ha registrado una pérdida de más del 50 por ciento en las 2,781.5 tareas en las que laboraban cercanas a la central.
“Después de que Punta Catalina entró en funcionamiento desde 2019, nuestro cultivo ha caído prácticamente a cero. El arroz era la fuente de producción más grande que tenía el municipio de Nizao; con todo su campo llegaron a cero”, explicó Fortuna, además de mencionar que no han podido realizar otras siembras “ni nada para remedio ahora mismo”.
Fortuna afirmó que la central termoeléctrica ha afectado el engranaje de producción de sus cultivos con las emisiones aéreas y las emisiones de cenizas.
“Eso está afectando a un nivel tal que cultivos... Nosotros nos hemos ido a la quiebra, estamos en calamidad total. Estamos pasando toda clase de penuria después de la inauguración de Punta Catalina”.
Además, aseveró que reclaman al menos 79 productores que esperan su parte de los US $6 millones, 363 mil 44.250, equivalentes a US $36,375.00 de indemnización por 174.94 hectáreas producidas por los agricultores.
“No podemos mandar los hijos a la universidad, no podemos comer, no podemos hacer nada porque dependemos de esto porque es lo que sabemos hacer. Si nos quitan este sustento, prácticamente nos están condenando a muerte”, dijo desesperado, asegurando que el administrador de Punta Catalina, Celso Marranzini, “se ha negado a recibirnos”.
Los agricultores mencionaron que fueorn al Ministerio de Agricultura para que envíe técnicos a realizar un levantamiento “serio, con coherencia, por personas que sí entienden la materia”.
Asimismo, Sixto Paulino dijo que desde que se inició el funcionamiento de la termoeléctrica, los residentes en la zona han sufrido alergias producto de las cenizas que genera el lugar, afectando a los niños y ancianos.
“Estamos sufriendo bastante picazón y los niños están enfermos. Todos estamos mal, a veces se me mete una comezón, pero sé que es por la ceniza”, contó Paulino, que tiene una parcela cerca del lugar y por esto se ve afectado.
También, aseguró que ha tenido grandes pérdidas: “Yo siembro berenjenas y yo con 100 llevaba un saco al mercado y por lo chiquitas que están tengo que meter 200 y pico, pero ya no lo llevo al mercado porque esa no la quieren”.
Los portavoces aseguraron que las pérdidas de cultivos han sido de pepinos, tomates, ajíes, lechosas, sandías, chinolas, aguacates, berenjenas, molondrones, yuca, batata, plátanos, guineos, rulos, habichuelas, maíz y mangos.
Las cuales se han visto afectadas por al menos 800 toneladas de cenizas tóxicas distribuidas en cuatro grandes lomas, una de ellas cubierta con una membrana plástica, tierra y material orgánico, así lo aseguraron los agricultores.
Por lo que atribuyen las pérdidas a las cenizas provenientes de la central y depositadas en el batey San José, en el distrito municipal de Catalina.
Además, asocian la calidad de sus cultivos a las emisiones aéreas de gases ácidos y materiales pesados de las dos plantas de carbón de Punta Catalina y al vertido de aguas residuales de estas plantas.
Señalaron que estas lomas de cenizas se encuentran a pocos metros del río Catalina y del arroyo Pastor o Naranjo, que son las fuentes de agua que irrigan la zona de cultivo. Por lo que además reclaman no ser consultados antes de iniciar la construcción de la central.