“Sendero de la Restauración”: las huellas de la gesta histórica en Santiago

160 años después de que los dominicanos lucharon por ser un territorio libre y soberano en la Guerra de la Restauración, la hidalga de los 30 Caballeros, recuerda su rol de primacía en la lucha independentista, reviviendo los episodios que se desarrollaron en la ciudad a través del Sendero de la Restauración, un recorrido por las huellas indelebles de los restauradores.

El recorrido inicia en el icónico Monumento a los Héroes de la Restauración, construido en el Cerro del Castillo, lugar donde el ejército dominicano se enfrentó a las tropas de intervención. Luego se desplaza a la calle Cuba con 16 de Agosto, a La casa paterna del general Matías Ramón Mella Castillo, donde murió el 4 de junio de 1864 en extrema pobreza, siendo enterrado cubierto por la Bandera Dominicana como fuera su deseo. Ahora, la vivienda se encuentra cubierta de murales, placas y una estatua del patriota.

Sublevación y fusilamientos

En la calle 16 de agosto con Sánchez, donde hoy está la Escuela Experimental Emilio Prud' Homme, estuvo la casa donde funcionaba el gobierno restaurador, el parque Los Chachaces o parque Arzobispo Portes, donde fue negociada la rendición de los españoles, y el Cementerio Municipal de La 30 de Marzo, en este último lugar fusilaron un grupo que se reveló en febrero de 1863.

En febrero cuando en Santiago se supo que la plaza de Guayubín, un municipio de la provincia Montecristi, había sido tomada por Lucas Evangelista de Peña y su gente, los dirigentes de la conspiración en la ciudad Corazón, que eran los miembros del Ayuntamiento y otras personas prominentes, se rebelaron, cuenta el historiador Edwin Espinal.

La sublevación fue derrotada y el 17 de abril de ese año, fueron fusilados frente al cementerio el poeta Eugenio Perdomo, Pedro Ignacio Espaillat, José Vidal Pichardo, Carlos de Lora, Ambrosio de la Cruz, el coronel Pierre Thomas y el general Antonio Bautista, responsables de la revuelta de Santiago. Actualmente, aunque en estado abandónico, allí se encuentra una tarja en honor a estos héroes.

Destino final de la caminata

De igual forma, se caminará por el parque Duarte, la catedral Santiago Apóstol el Mayor, que fungió como hospital para los españoles y la gobernación, donde en ese entonces, se encontraba la cárcel en que mantuvieron cautivos a los involucrados en la rebelión de febrero de 1863. Asimismo, la fortaleza San Luis, la escuela Salomé Ureña y la Escuela Basica Emilio Prud’Homme.

El historiador Espinal ha planteado este sendero como una forma de recordar nuestra historia y un destino de turismo histórico.