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La prisión preventiva, una "bomba de tiempo" para el sistema penitenciario
El asunto está causando mucha preocupación entre juristas y catedráticos universitarios, quienes han pedido a jueces y fiscales que dejen de hacer uso abusivo y excesivo del tratamiento de esa medida cautelar.
Crece la preocupación en el país por el aumento imparable de la población de personas en encierro preventivo.
Esto está causando mucha preocupación entre juristas y catedráticos universitarios, quienes han pedido a jueces y fiscales que dejen de hacer uso abusivo y excesivo del tratamiento de la prisión preventiva.
La población carcelaria en República Dominicana ha experimentado un crecimiento exponencial en los últimos años, impulsado en gran medida por el aumento del número de presos preventivos.
Conforme estadística de la Dirección General de Servicios Penitenciarios y Correccionales (DGSPC), hasta el mes de julio del pasado años se tiene registrado que unos 14, 639 privados de libertad guardan prisión en las diferentes cárceles del país son preventivos de un total de 25, 987 internos, de los cuales 11,348 son condenados.
Entre los presos preventivos se encuentran 1,262 extranjeros, quienes cumplen la medida de coerción más gravosa, contemplada en el acápite 7, del artículo 226, del Código Procesal Penal, de un total de 1,771 privados de libertad de distintas nacionalidades.
Estos niveles están causando mucha preocupación entre juristas y catedráticos universitarios, quienes piden a jueces y fiscales dejar de hacer un uso abusivo y excesivo del tratamiento de la prisión preventiva.
Miles de personas se encuentran recluidas sin haber sido condenadas por ningún delito, lo que genera una serie de problemas que ponen en jaque el sistema penitenciario.
El hacinamiento, la falta de recursos y las condiciones insalubres son algunas de las consecuencias directas de esta situación.
Además, la prisión preventiva tiene un impacto negativo en la vida de las personas y sus familias, ya que implica la pérdida de empleo, la separación familiar y la estigmatización social.
Juristas consultados por Listín Diario señalan que el uso excesivo de la prisión preventiva se debe a diversos factores, entre ellos las demoras en los procesos judiciales, la falta de alternativas a la prisión y la percepción de que la cárcel es la única medida eficaz para garantizar la seguridad ciudadana.
Consideran que para hacer frente a esta problemática, es necesario implementar una serie de reformas que permitan reducir el número de personas en prisión preventiva, como la agilización de los procesos judiciales, la promoción de medidas cautelares alternativas y la inversión en programas.
La mayor cantidad está recluida en recintos del sistema tradicional, donde cumplen condena y medidas de coerción, mientras que los restantes están en los centros de corrección y rehabilitación del Nuevo Modelo de Gestión Penitenciaria.
El sistema penitenciario cuenta con 41 centros de corrección y rehabilitación (CCR) y tres Centros de Atención a Privados de Libertad Provisional (Caplip).
República Dominicana ocupa el séptimo lugar de hacinamientos entre los países de la región, con un 183.2 de aforo, según un estudio de The World Prison Brief, que es la principal de base de datos sobre asuntos penitenciarios en el mundo.
En igual sentido, en materia de ocupación carcelaria con relación al espacio disponible, el país posee el tercer lugar de las naciones del área del Caribe y el lugar 26 en todo el mundo, que comprende una lista de 206 Estados.