Miguel Mejía afirma presentó renuncia en más de una ocasión y Abinader no las aceptó
"De la referida oficina, lo único que me llevaré es el cuadro del patricio Juan Pablo Duarte que me regaló el afamado pintor dominicano Miguel Núñez. Duarte no merece permanecer ahí", dijo el exfuncionario.
El exministro sin cartera para Políticas de Integración Regional, Miguel Mejía, se refirió nuevamente a su destitución del cargo y aseguró que presentó su renuncia al presidente Luis Abinader en más de un ocasión, pero este no la aceptó.
Mejía sostuvo que su desvinculación no se pude vincular de manera exclusiva al tema de Venezuela, sino a cuestionamientos que ha realizado funcionarios del sector eléctrico, energético, política exterior, equipo económico y una franja del Ministerio Público.
Afirmó que su mayor satisfacción es que su destitución no responde a un mal manejo de fondos del Estado ni a acciones conductuales reñidas con la ética y la moral.
Mediante un comunicado, el secretario del Movimiento Izquierda Unida (MIU), expresó que en privado le había manifestado sus consideraciones a Abinader, pero que ante la indiferencia del mandatario no decidió hacerse cómplice con el silencio.
“En primera instancia y en privado le había expresado mis consideraciones al presidente y, ante su indiferencia, sustentada tal vez en alguna razón, no debía hacerme cómplice con el silencio y mi indiferencia frente a tantas irregularidades y desaciertos que afectan directamente el desarrollo y la soberanía del país”, aseguró el exfuncionario.
En la misiva, al hablar de su renuncia Mejía afirmó que por un asunto de prudencia y respeto al presidente y a la memoria de su padre “nunca dije públicamente que había presentado renuncia en más de una ocasión, y que por alguna razón él (Luis Abinader) no las aceptó”.
Explicó que el haber renunciado lo llevó a no hacer vida activa en el Gobierno ni en la oficina que tenía asignada en el Palacio Nacional, la cual ocupaba desde el segundo período de la gestión del expresidente Leonel Fernández, en 2004.
Ante esto, Miguel Mejía consideró que el presidente Luis Abinader pudo haberse evitado emitir el decreto que lo destituía y “sencillamente haberle dado curso a mi renuncia”.
Asimismo, dijo que al no hacer vida en la oficina que tenía asignada en el Palacio Nacional, solo se llevará un cuadro del patricio Juan Pablo Duarte.
“De la referida oficina, como no he hecho vida allí en lo que va de este Gobierno, lo único que me llevaré es el cuadro del patricio Juan Pablo Duarte que me regaló el afamado pintor dominicano Miguel Núñez. Duarte no merece permanecer ahí”, apuntó.
El secretario del MIU indicó que su permanencia en el Gobierno de Abinader no fue producto de un acuerdo político con su partido ni con él propio, sino por el vínculo familiar y personal que viene desde su padre.
“La organización política que me honra presidir no participamos en los procesos electorales de febrero y mayo de 2024. En febrero pasado publicamos nuestra posición a través de un comunicado titulado “Decidimos preservarnos”, en el que señalamos el transfuguismo, la falta de propuestas concretas conforme a las reales necesidades del pueblo dominicano, las alianzas al vapor, candidatos con su hoja de servicio muy cuestionada”, señaló.
Mejía recalcó que la destitución no le tomó por sorpresa y que colocará el decreto en un cuadro de honor con una foto de José Rafael Abinader Wasaf, a quien definió como un hombre anti trujillista, estuvo al lado de Caamaño en la guerra de abril del 1965, muy amigo del profesor Juan Bosch.
“¿Es honroso seguir formando parte de un Gobierno con todos estos elementos que hemos venido señalando, en privado y en público? Me han condecorado”, concluyó.