Abinader dice que crisis haitiana ha “drenado recursos necesarios para el desarrollo dominicano”
El mandatario llamó al orden internacional a que debe responder con mayor prontitud cuando surgen situaciones de crisis profunda que desbordan las fronteras de un país
El presidente Luis Abinader dijo que tras la muerte del exmandatario haitiano Jovenel Moïse, en 2021, República Dominicana ha estado “solo” lidiando con temas que han “drenado recursos necesarios para el desarrollo dominicano”.
“Nos hemos encontrado solos, lidiando con estos temas, sin colaboración de una contraparte haitiana efectiva que pueda imponer en su territorio el imperio de la ley. Esto ha drenado recursos necesarios para el desarrollo dominicano”, expresó el mandatario tras recibir este miércoles el premio Chairman’s Award for Leadership in the Americas en la 54 Conferencia sobre las Américas, en la ciudad de Washington DC.
Asimismo, el mandatario llamó al orden internacional a que debe responder con mayor prontitud cuando surgen situaciones de crisis profunda que desbordan las fronteras de un país e impiden la convivencia pacífica.
Abinader se refirió a uno de los retos más difíciles que República Dominicana ha enfrentado en varios lustros. “Me refiero a las consecuencias del descalabro político, económico y social de Haití”.
El gobernante valoró que después de tantos años de reclamo ante las Naciones Unidas y otros foros, la comunidad internacional finalmente ha escuchado.
Dando como resultado la instalación del Consejo Presidencial de Transición en Haití y la llegada de la Misión Multinacional de Apoyo a la Seguridad en ese país. “Nos alientan a pensar que se ha abierto un camino hacia el restablecimiento de la paz, la seguridad y la democracia en Haití”, dijo Abinader.
El mandatario agradeció a Estados Unidos, Canadá, Kenia, los países de CARICOM, así como al Consejo de Seguridad y al secretario general de las Naciones Unidas. También, y también reconoció el esfuerzo de la Organización de Estados Americanos (OEA) y de su secretario general.
Dijo esperar que todos los sectores haitianos que se han comprometido con este camino hagan el sacrificio necesario para llevar a su nación por el sendero hacia la paz y la democracia.
“Es importante decir que simultáneamente con la pacificación de Haití, el país requerirá un plan de inversión de envergadura para que el pueblo haitiano pueda tener acceso a lo esencial: empleo, salud y educación, de tal manera que puedan vislumbrar un futuro más promisorio”, apuntó.
Reconocimiento
“Me siento muy honrado de ser el primer mandatario dominicano en recibir este premio. Entiendo que este se debe al notable desempeño que en los últimos años ha mostrado República Dominicana por el mayor compromiso de mi gobierno con los valores democráticos, el crecimiento económico, el respeto a las libertades y derechos ciudadanos, la reforma del Estado y la tesonera lucha contra la corrupción y a favor de la transparencia”, dijo el jefe de Estado dominicano.
El presidente Abinader dijo que el reconocimiento implica una mayor responsabilidad con la gobernanza democrática, y se comprometió frente al consejo a continuar profundizando hasta el último día en que ejerza el cargo de presidente en República Dominicana.
El mandatario expresó que, en 1978, arrancó en República Dominicana la ola democratizadora de América Latina con la elección a la presidencia del candidato del partido al cual pertenece, Antonio Guzmán, padre de la actual embajadora dominicana en Estados Unidos, Sonia Guzmán.
Abinader destacó que desde entonces en el país se han celebrado 12 elecciones presidenciales consecutivas que han consolidado la estabilidad política y la gobernabilidad democrática.
“Hoy, a nadie le debe caber duda de que la democracia es un bien frágil bajo asedio en muchos lugares del mundo. Nosotros, los dominicanos, nos sentimos orgullosos de este logro continuo en la profundización de nuestra democracia”, expuso el presidente Abinader.
Por otro lado, aseguró la plena imparcialidad del Poder Ejecutivo para las próximas elecciones a celebrarse el 19 de mayo en República Dominicana sean libres, justas y transparentes.
“Quiero ser categórico frente a ustedes, como partido compuesto por demócratas convencidos, puedo asegurarles la plena imparcialidad del Poder Ejecutivo para que dicho certamen sea libre, justo y transparente” aseguró Abinader.
Agregó que la Junta Central Electoral, ha abierto las puertas a todos los observadores internacionales en el acompañamiento del proceso, asegurando así la integridad de las elecciones.
Discurso íntegro del presidente Luis Abinader en el premio Chairman’s Award for Leadership in the Americas
Salutaciones
Señoras y señores,
Es para mí un honor dirigirme a ustedes en esta Cincuenta y cuatro (54) Conferencia sobre las Américas en la cual recibo el Chairman’s Award for Leadership in the Americas, gran distinción que me otorga el Consejo de las Américas; un reconocimiento que acojo en nombre del pueblo dominicano y del mío propio.
Agradezco al Consejo, en la persona de su presidente el señor Andrés Gluski, por este galardón. Es la primera vez que esta organización reconoce a una economía en desarrollo del Caribe.
Me siento muy honrado de ser el primer mandatario dominicano en recibir este premio. Entiendo que éste se debe al notable desempeño que en los últimos años ha mostrado República Dominicana por el mayor compromiso de mi gobierno con los valores democráticos, el crecimiento económico, el respeto a las libertades y derechos ciudadanos, la reforma del Estado y la tesonera lucha contra la corrupción y a favor de la transparencia.
Este reconocimiento implica una mayor responsabilidad con la gobernanza democrática, y me comprometo frente a ustedes a continuar profundizándola hasta el último día en que ejerza el cargo de Presidente.
De hecho, este es un legado político que nos llega desde lejos. En 1978, arrancó en República Dominicana la ola democratizadora de América Latina con la elección a la presidencia del candidato de nuestro partido, Antonio Guzmán, el padre de la actual embajadora dominicana en Estados Unidos, aquí presente, doña Sonia Guzmán. Desde entonces hemos celebrado 12 elecciones presidenciales consecutivas que han consolidado la estabilidad política y la gobernabilidad democrática en nuestro país.
Hoy, a nadie le debe caber duda de que la democracia es un bien frágil bajo asedio en muchos lugares del mundo. Nosotros, los dominicanos, nos sentimos orgullosos de este logro continuo en la profundización de nuestra democracia.
Como ustedes saben las elecciones generales dominicanas se celebrarán el próximo domingo 19 de mayo. Quiero ser categórico frente a ustedes: como partido compuesto por demócratas convencidos, puedo asegurarles la plena imparcialidad del Poder Ejecutivo para que dicho certamen sea libre, justo y transparente.
En consonancia con esto, la Junta Central Electoral, ha abierto las puertas a todos los observadores internacionales en el acompañamiento del proceso, asegurando así la integridad de nuestras elecciones.
Señoras y señores,
Desde hace cierto tiempo, República Dominicana viene mostrando un crecimiento económico sostenido, fruto del esfuerzo de todos los sectores del país. Con nuestra llegada al gobierno hemos profundizado esa tendencia, primero reduciendo el impacto económico de la pandemia y luego impulsando una recuperación rápida y contundente, gracias, en buena medida, a las políticas públicas que adoptamos.
Del 2021 al 2023, nuestro Producto Interno Bruto ha alcanzado un crecimiento promedio del 6.5% anual, superior a la media regional. Este logro nos ha llevado a ser la séptima economía de América Latina y el Caribe.
Por primera vez, el año pasado llegaron más de 10 millones de turistas a República Dominicana, lo que nos sitúa como el segundo país más visitado de América Latina y el primero del Caribe.
El año pasado exportamos casi 13 mil millones de dólares. A nadie debe sorprender que, de esta cifra, las exportaciones de tabaco totalizaron 1,208 millones de dólares, pero es poco conocido que nuestras zonas francas exportaron 1,173 millones dólares en productos eléctricos, principalmente circuitos, y 2,444 millones de dólares en equipos médicos y quirúrgicos.
Es importante señalar que estos productos cumplen con los estándares sanitarios y de fabricación exigidos por los mercados más sofisticados del mundo. Las empresas instaladas en República Dominicana tienen la capacidad para participar de las cadenas de suministro de los productos tecnológicos más complejos, como son los semiconductores. Mi gobierno está plenamente comprometido y trabaja activamente para lograr la inserción de República Dominicana en las cadenas de suministro de Estados Unidos en el ensamblaje, experimentación, empacamiento y distribución de los semiconductores.
Buena parte de los logros obtenidos en estos últimos años se ha debido a una estrategia diseñada para incluir al sector privado en una amplia Alianza Público-Privada que incluye a diversos sectores de la vida nacional: Gobierno, agentes sociales y, por supuesto, el sector empresarial. Esta alianza es un sello distintivo de nuestra administración.
Por otro lado, gracias a una firme disciplina, hemos alcanzado los mayores niveles de reservas internacionales de divisas, casi 14 mil millones de dólares, lo que nos ha permitido mantener la estabilidad macroeconómica y el tipo de cambio dentro del rango establecido por nuestro Banco Central.
También hemos logrado un aumento considerable de la inversión extranjera, con un monto sin precedentes en la historia dominicana, superando en 2023 los 4,300 millones de dólares, la cifra de inversión extranjera más alta en Centro América y el Caribe.
Esto refleja la confianza de los inversionistas extranjeros en el empuje de la economía dominicana, y además en la seguridad jurídica que hoy día impera en nuestro país.
Esta seguridad jurídica tiene su piedra angular en el respeto al Estado de derecho, a través de tres ejes: 1) la observancia escrupulosa de nuestro gobierno a la independencia del Ministerio Público y del Poder Judicial, 2) nuestra férrea lucha contra la corrupción administrativa, un importante legado de mi gestión, y 3) la implementación de un gobierno más abierto, más transparente y más eficiente.
Consecuentes con ello, hemos tomado medidas para garantizar un Ministerio Público independiente y promover la designación de profesionales autónomos en organismos neurálgicos del Estado dominicano.
República Dominicana ha mostrado avances fehacientes en temas como la lucha contra la corrupción y a favor de la transparencia gubernamental, la libertad de expresión, la estabilidad económica y la reforma en seguridad ciudadana. Permítanme ofrecerles algunos ejemplos con índices e informes fehacientes de instituciones de reconocida reputación:
• En cuanto a democracia y derechos humanos, el reconocido índice de Democracia Liberal 2023 del Instituto V-Dem de la Universidad de Gotemburgo, muestra que República Dominicana ha aumentado la calidad de su democracia en los últimos años, mejorado 27 posiciones desde el 2020.
• En relación a la libertad de expresión, el Índice de Chapultepec 2023, el más importante en esa área evidencia que República Dominicana obtuvo la puntuación más alta en América Latina, con un 81% ocupando el primer lugar, no solo de América Latina, sino de toda América incluyendo Estados Unidos y Canadá.
• En el caso de la transparencia y la lucha contra la corrupción, desde 2020, República Dominicana ha mejorado 29 posiciones en el Índice de Percepción de la Corrupción de Transparencia Internacional. Este dato coincide con el que publica el Anticorruption Working Group de este Consejo de las Américas en su índice de Capacidad de Lucha Contra la Corrupción, según el cual en 2023 República Dominicana se mantuvo como el 5to país mejor capacitado de la región.
• Sobre seguridad ciudadana, el reporte de 2023 de InSight Crime, revela que la tasa de homicidios en República Dominicana descendió de 13.2% en 2022 a 11.5% en 2023, muy por debajo del promedio regional.
• Por su parte, el último informe de Desarrollo Humano 2022 del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo demuestra que República Dominicana ha superado los niveles prepandemia de desarrollo humano.
Señoras y señores,
Es mi firme creencia que una democracia estable no sólo debe anclarse en las dinámicas políticas y sociales a lo interno del país, sino también en un conjunto de principios y valores internacionales que fomenten la paz, los derechos humanos, la cooperación internacional y el comercio. Es por esto que mi gobierno es un firme defensor de un multilateralismo fortalecido.
Los dominicanos creemos en un orden internacional basado en normas, en la solución pacífica de las controversias y en el apego a las obligaciones internacionales, asumidas libre y soberanamente por los Estados. Estos han sido fundamentos de nuestro hemisferio que valen la pena defender mediante el trabajo mancomunado de los Estados, el sector privado y la sociedad civil.
Estos valores y principios servirán de inspiración para los temas nodales que guiarán la décima Cumbre de las Américas que, como ustedes saben, se celebrará a fines del año que viene en República Dominicana.
Amigas y amigos,
El orden internacional debería responder con mayor celeridad cuando surgen situaciones de crisis profunda que desbordan las fronteras de un país e impiden la convivencia pacífica. En este sentido, permítanme referirme a uno de los retos más difíciles que República Dominicana ha enfrentado en varios lustros: me refiero a las consecuencias del descalabro político, económico y social de Haití.
Siendo dos Estados en desarrollo que compartimos una misma isla y siendo el único vecino terrestre uno del otro, la convivencia requiere un grado de corresponsabilidad en aspectos como la seguridad fronteriza, la lucha contra el delito trasnacional, la gestión justa y equitativa de los recursos naturales compartidos, la gobernanza migratoria y tantos otros, de una interdependencia compleja como la nuestra.
Sin embargo, la virtual ausencia de un Estado haitiano funcional desde el asesinato del presidente Jovenel Moïse, hace tres años, ha implicado para República Dominicana asumir una carga desproporcionada en todos estos frentes. Nos hemos encontrado solos, lidiando con estos temas, sin colaboración de una contraparte haitiana efectiva que pueda imponer en su territorio el imperio de la ley. Esto ha drenado recursos necesarios para el desarrollo dominicano.
Señoras y señores,
Después de tantos años de reclamo ante las Naciones Unidas y otros foros a nuestro alcance, la comunidad internacional finalmente ha escuchado. La instalación del Consejo Presidencial de Transición en Haití y la inminente llegada de la Misión Multinacional de Apoyo a la Seguridad en ese país, nos alientan a pensar que se ha abierto un camino hacia el restablecimiento de la paz, la seguridad y la democracia en Haití.
Por ello, agradecemos a Estados Unidos, Canadá, Kenia, los países de CARICOM, así como al Consejo de Seguridad y al secretario general de las Naciones Unidas. Asimismo, agradecemos el esfuerzo de la OEA y de su secretario general.
Esperamos que todos los sectores haitianos que se han comprometido con este camino hagan el sacrificio necesario para llevar a su nación por el complejo, pero ineludible sendero hacia la paz y la democracia.
Es importante decir que simultáneamente con la pacificación de Haití, el país requerirá un plan de inversión de envergadura para que el pueblo haitiano pueda tener acceso a lo esencial: empleo, salud y educación, de tal manera que puedan vislumbrar un futuro más promisorio.
Amigas y amigos,
El gobierno que inicié en agosto de 2020 ha enfrentado varios grandes retos: la pandemia, la cual superamos con éxito; la crisis haitiana, cuyo futuro hoy es más esperanzador; las consecuencias de los conflictos internacionales que han generado volatilidad de los precios internacionales y la disrupción de las cadenas de suministro, impactando en una economía abierta como la nuestra.
También tenemos desafíos pendientes como cumplir con la agenda 2030, en particular con las metas: fin de la pobreza, hambre cero y una importante reducción de las desigualdades.
Más allá de esos aspectos puntuales, debemos avanzar en: 1) Mejorar la calidad de nuestra educacion que nos permita participar competitivamente en la economía del conocimiento; 2) una reforma penitenciaria que complemente la reforma policial iniciada; y 3) un pacto fiscal que permita distribuir la carga impositiva con mayor justicia y que aumente las recaudaciones para poder cumplir con estos desafíos asumidos en nuestra Estrategia Nacional de Desarrollo.
Señoras y señores,
Todo reto trae consigo nuevas oportunidades. Si bien cada nación enfrenta sus propios desafíos, existen oportunidades que compartimos globalmente. En la actualidad, la humanidad está más consciente de la necesidad urgente de proteger nuestro planeta. Al mismo tiempo, los avances en tecnologías como la Inteligencia Artificial abren caminos hacia un futuro más próspero. Es crucial que trabajemos juntos para capitalizar estas ventajas y enfrentar nuestros desafíos individuales y colectivos de manera más efectiva.
Ahora bien, al final del día lo más importante es llevar la ética al poder, como ha dicho la filósofa española Adela Cortina. Este es el único sendero real para la humanidad en el siglo 21.
Muchas gracias.