12 de octubre
Embajada celebró anoche Fiesta Nacional de España
La actividad, en la residencia oficial, contó con la presencia de la primera dama, Raquel Arbaje, en representación del presidente Luis Abinader
El embajador de España en República Dominicana, Antonio Pérez-Hernández y Torra, ofreció anoche una recepción con motivo a la Fiesta Nacional de España conmemorada cada 12 de octubre.
La actividad, en la residencia oficial, contó con la presencia de la primera dama, Raquel Arbaje, en representación del presidente Luis Abinader.
Durante su intervención, el embajador de España destacó el carácter especial de las relaciones entre ambos países, señalando que “nuestras relaciones políticas, económicas, sociales, culturales y de todo tipo, van viento en popa”.
Buenas relaciones
Agradeció al Presidente Abinader el impulso que ha dado a la relación bilateral durante su mandato y añadió que “los contactos políticos son cada vez más frecuentes, las inversiones de las empresas españolas se amplían y se diversifican; los intercambios comerciales aumentan; las relaciones de cooperación son cada vez más estrechas –actualmente hay más de 80 proyectos en ejecución- y, sobre todo, se fortalecen los profundos vínculos humanos que existen entre ambos pueblos”.
“Los españoles admiramos muchas cosas de República Dominicana y de los dominicanos, su estabilidad política, su crecimiento económico, su progreso y su democracia”, dijo Pérez-Hernández y Torra.
Dominicanos en España
Afirmó que España tiene mucho que aprender de República Dominicana y resaltó las aportaciones de la comunidad dominicana en España, empezando por su cortesía, sus buenos modales y su simpatía.
Recordó que España y República Dominicana mantienen unas “excelentes relaciones”, no sólo en lo bilateral sino también a nivel multilateral, haciendo referencia al papel que juega el país en el ámbito iberoamericano, puesta de manifiesto en la exitosa Presidencia Pro tempore que culminó en la Cumbre Iberoamericana organizada en Santo Domingo.
Por otra parte, se refirió al deseo del gobierno español de impulsar las relaciones entre la Unión Europea y América Latina y el Caribe durante su Presidencia del Consejo de la Unión Europea. Hizo especial énfasis en el papel siempre constructivo de RD, afirmando que “este país siempre es parte de la solución y nunca del problema”.