Primera dama se sorprende por publicación del testimonio de mujer abusada en su niñez
La primera dama de la República y presidenta del Gabinete de Niñez y Adolescencia, Raquel Arbaje, formuló objeciones a la forma en que Listín Diario enfocó el testimonio de una madre que fue abusada a los 12 años de edad por un hombre mayor.
Arbaje expresó su “asombro” porque se mostrara un caso individual como “modelo de éxito al alcance de toda niña sexualmente abusada”.
En una carta dirigida al director del Listín, Miguel Franjul, y firmada en conjunto con la presidenta ejecutiva del Consejo Nacional para la Niñez y la Adolescencia (Conani), Luisa Ysabel Ovando, Arbaje se refirió al reportaje titulado “Yahaira Liriano: ‘Me convertí en madre a los 12 años y eso no me impidió triunfar’”, publicado el pasado lunes 26 de junio en las páginas de la sección L2.
A continuación, texto de la carta:
“Como instituciones y como personas, somos intransigentes defensores de la libertad de prensa y expresión. Creemos, asimismo, que el periodismo tiene el deber primordial de orientar a la ciudadanía para que, adecuadamente informada, asuma decisiones conscientes. El Listín Diario ha sido históricamente un encomiable ejemplo de este periodismo orientador. Bajo su dirección, Sr. Franjul, hemos visto con profunda satisfacción ciudadana cómo este medio ha abanderado causas sociales que contribuyen a dignificar la vida nacional.
De ahí que leyéramos con asombro el reportaje Yahaira Liriano: “Me convertí en madre a los 12 años y eso no me impidió triunfar”, en el que una joven mujer narra cómo fue violada sexualmente por un hombre mayor y las vicisitudes a que se vio enfrentada a raíz de este acontecimiento, para concluir en que nada de lo acontecido le impidió “triunfar”.
No entraremos a considerar su caso particular ni las incongruencias cronológicas de sus dificultades. Damos por supuesto que todo aconteció tal como ella lo narra o, en todo caso, con pocas diferencias. Sí vale aclarar que en el caso de la testimoniante no hubo “seducción”, sino violación sexual. A los once años, edad de su experiencia, solo hay violación, agresión o abuso sexual, porque no se tiene la autonomía de la voluntad necesaria para el consentimiento.
Lo que nos asombra e inquieta es que un caso individual sea mostrado como modelo de éxito al alcance de toda niña sexualmente abusada y convertida en madre en una edad en que ni física, ni social ni psicológicamente se está preparada para esas funciones.
Ser madre en la niñez y la adolescencia está llena de riesgos: es mayor la deserción escolar, su riesgo de sufrir violencia, mayor tasa de desempleo e inserción laboral desventajosa. Las estadísticas son contundentes al respecto:
1. 7 de cada 10 adolescentes estudiaban cuando quedaron embarazadas.
2. 5 estudiaban durante el embarazo.
3. 2 continuaron estudiando después del nacimiento.
4. 6.2% de las que fueron madres entre los 10 y 19 años lograron terminar una licenciatura, y el 0.6% cursó estudios de posgrado.
5. De acuerdo con un cálculo de oportunidad educativa, las que fueron madres en ese período de su vida dejan de percibir anualmente RD$2,569 millones con relación a las que fueron madres después de los 20 años.
6. Su tasa de desempleo es de 9.1% y la inactividad laboral, de 24.7%.
7. Perciben ingresos un 20.4% menores que quienes fueron madres adultas.
8. En el primer trimestre de 2020, nacieron vivos 11,159 hijos de adolescentes y 120, muertos. De los vivos, 832 tenían bajo peso al nacer, 565 fueron prematuros y 18 nacieron con malformaciones.
9. 123 por cada 100,000 nacimientos de madres entre 10 y 19 años termina en muerte materna.
Todos estos indicadores, obtenidos mediante la metodología Milena, aplicada por UNFPA, y por la Oficina Nacional de Estadísticas (ONE) conducen en la realidad de la vida de nuestras niñas y adolescentes madres a la reproducción del círculo de pobreza intergeneracional y a la castración de las potencialidades de miles de ellas, que hubieran podido encontrar caminos hacia un mejor futuro.
Puesto que el embarazo en la niñez y la adolescencia no es un problema individual, sino también social, veamos ahora lo que implica para el país la maternidad temprana:
1. Las niñas y adolescentes fallecidas por causas relacionadas con el embarazo, el parto y el puerperio, produjo una pérdida social de RD$193 millones, que es lo que hubieran aportado a la economía de no haber corrido tan triste suerte.
2. El embarazo en la niñez y la adolescencia implica un gasto anual en salud de RD$1,053 millones.
3. La pérdida de ingresos fiscales se calcula en RD$445 millones al año.
En diciembre de 2021, la República Dominicana dio un paso transcendental al presentar el presidente Luis Abinader la Política de Prevención y Atención a las Uniones Tempranas y el Embarazo en Adolescentes, cuya ejecución multisectorial se empeña en reducir al mínimo posible ambas situaciones.
Hace apenas dos meses, el Gabinete de Niñez y Adolescencia (GANA-RD) y el Consejo Nacional para la Niñez y la Adolescencia (CONANI), lanzamos una campaña con el lema “Toma el control, ponlo en pausa”, para sensibilizar a la población, y en particular a los niños, niñas y adolescentes, sobre las implicaciones en sus vidas de la maternidad y la parentalidad temprana.
Esperamos, Sr. Director, que podamos contar con su apoyo en favor, no solo para esta campaña, sino para educar y concienciar a la población acerca de las consecuencias de un problema que roba a un alto porcentaje de nuestras niñas y adolescentes, la oportunidad de una vida plena”.