Carlos Alberto Montaner su fructífero paso por la vida
Montaner. Una mente brillante y un articulista inolvidable en la prensa mundial.
En diciembre de 1999, el célebre escritor fue invitado a un almuerzo en el periódico La Nación. En la foto, Montaner conversa con Miguel Franjul y Federico Henríquez Gratereaux.
Listín Diario está de luto. Ha fallecido Carlos Alberto Montaner (La Habana, Cuba, 3 de abril de 1943; Madrid, España, 29 de junio de 2023), una de las firmas más lúcidas acogidas en sus páginas por muchos años.
Prestigió las páginas de opinión de este periódico, sobre todo, al suplemento cultural “Lecturas de Domingo”.
Siempre será recordado no solo como un colaborador desinteresado, riguroso, ético y profundo, sino también un amigo entrañable, defensor de la democracia, la libertad de expresión y de los derechos ciudadanos.
Su firma se hizo sentir, de manera permanente, desde 1999, en el periódico La Nación, hasta la presente primavera de 2023; colaboró en los distintos diarios dirigidos por Miguel Franjul en Santo Domingo, así como en otros espacios de prensa, radiales y televisivos del país. Fue un gran amigo de la República Dominica, y nos visitó en innumerables ocasiones para impartir charlas, conferencias y encuentros. Aquí dejó grandes amigos y compartió con figuras de primer nivel. Los asuntos dominicanos no le fueron ajenos, y en incontables ocasiones su solidaridad con las distintas causas del país se hicieron sentir, tanto en su palabra como en sus escritos.
Fue un periodista de garra, escritor brillante, un intelectual de pies a cabeza que hablaba y escribía para todos los públicos gracias a la profunda sencillez de su lenguaje. Sus escritos sobresalen también por su humor mordaz, contagioso y refrescante.
Carlos Alberto Montaner revisa el suplemento impreso “Lecturas de Domingo” cuando salía en La Nación.
Constantemente era requerido por CNN y otras grandes cadenas televisivas de noticias como comentarista de altura.
Hijo de una profesora y un periodista, nació en el sector conocido hoy como La Habana Vieja. Hizo el Bachillerato en el Instituto del Vedado. Desde muy joven se preocupó por los destinos de su patria. Apoyó a la Revolución, pero pronto se distanció de ella. A los 17 años fue sentenciado a 20 años de cárcel por participar en en la resistencia contra el regimen. Marchó al exilio y recomenzó su actividad intelectual pocos años después.
Ejerció múltiples oficios hasta que se labró su propio porvenir como escritor. Fundó y dirigió desde Madrid la editorial Playor. Dicho sello, integrado y sostenido prácticamente por su pequeño núcleo familiar se hizo sentir tanto comercial como literariamente por la seriedad de sus contenidos, calidad estética y libertad de pensamiento.
También creó la agencia de noticias Firmas Press, desde la cual surtía, con sistemática regularidad, a diversos periódicos mundiales, artículos de pensamiento de importantes intelectuales de Iberoamérica, así como los suyos propios.
De forma paralela a su incansable labor intelectual, publicó por los prestigiosos sellos Alfaguara y Pengium Randolf House sus novelas, y memorias. “Perromundo” (1972), “Trama” (1987), “La mujer del coronel” (2011), “Otra vez adiós” (2012) y “Sin ir más lejos” (2021).
Fueron muy importantes sus textos a seis manos con los escritores Plinio Apuleyo Mendoza y Álvaro Vargas Llosa “Manual del perfecto idiota latinoamericano”, “El regreso del idiota” y “Fabricantes de miseria”.
Fue muy atacado por la ultraizquierda mundial y le endilgaba epítetos falsos como “terrorista”, “agente de la CIA”, “prófugo de la justicia”, “enemigo de los pueblos” y otras veleidades que fueron debidamente respondidas y aclaradas por Montaner en una de sus célebres columnas publicadas en Listín Diario.
Su nombre es un ejemplo y guía para la historia democrática de Cuba y América Latina. Su histórica frase escrita al final de sus memorias: “Hice lo que pude”, lo consagra en la memoria colectiva. Los cubanos, junto al resto de la humanidad amante de los derechos humanos, siempre le agradecerá su coraje, sacrificio y entrega a la causa de la libertad.
Polémica con Silvio Rodríguez
Según reza en su autobiografía, Montaner sostuvo una polémica con su compatriota, el cantautor Silvio Rodríguez (en el año 2010), después de que éste publicara un poema titulado “Preguntas de un trovador que sueña”, y una de esas preguntas decía: “Si los miles de cibanos que perdimos famila en atentados de la CIA hiciéramos una carta de denuncia, la firmaría Carlos Alberto Montaner?, a la que Montaner respondió afirmativamente, conminando al entonces joven cubano a firmar una carta en defensa de los presos y perseguidos políticos. Esto originó un intercambio público de misivas entre ambos.