María Amalia León un referente de nuestra cultura

“Es importante resaltar que el Centro León no solo se preocupa por las exposiciones, sino también intenta poner su granito de arena para fomentar el conocimiento y la apreciación del arte y la cultura entre las nuevas generaciones...”.

La directora de la Fundación “Eduardo León Jiménez” se reúne habitualmente con jóvenes.

La directora de la Fundación “Eduardo León Jiménez” se reúne habitualmente con jóvenes.centro leòn

Integridad, innovación, pasión, colaboración y compromiso son los ejes principales que guían la brújula del Centro Cultural Eduardo León Jimenes, concebido para la creatividad, la investigación, el encuentro y el disfrute de todos.

Fue inaugurado en octubre de 2003, en conmemoración al centenario de la fundación La Aurora, primera empresa de la familia León. Este museo e institución cultural acopia 40 colecciones sobre artes visuales, arqueología, etnografía, folklore dominicano, cultura popular dominicana, fotografía dominicana, bibliográfica, cartografía, documental y multimedia.

Maria Amalia León difunde sus conocimientos y participa en las actividades del Centro.

Maria Amalia León difunde sus conocimientos y participa en las actividades del Centro.centro león

Además, sus programas y proyectos se articulan en torno a tres campos temáticos: creatividad, identidad y habitabilidad, reflejados a través de actividades de animación sociocultural y educación.

Cuando se dice que es un lugar creado para el disfrute de todos, es sin excepción alguna. Según María Amalia León, presidenta de la Fundación Eduardo León Jimenes y directora del Centro León, “han tenido en consideración, a lo largo de sus veinte años de labor, las normas establecidas por el Consejo Internacional de Museos (ICOM) para garantizar la inclusión y la accesibilidad en los museos”.

“Entre ellas están la vías adecuadas de acceso a las personas con discapacidades motoras, las audio guías, la inclusión en sus talleres de niños con necesidades especiales y la preparación de los mediadores para atender a este segmento de nuestros públicos durante las visitas a las salas expositivas”.

Difunde sus conocimientos y participa en las actividades del Centro.

Difunde sus conocimientos y participa en las actividades del Centro.Centro león

Impacto en el país

La Ciudad Corazón tiene una historia cultural de raíces profundas en el tiempo. Es tanto así que cuenta con instituciones culturales centenarias, como es el caso del Ateneo Amates de la Luz, así como entidades que atesoran una riqueza patrimonial y un quehacer cultural permanente.

Las casi dos décadas de accionar que tiene el Centro León son relativamente recientes en la gestión cultural de la ciudad, sin embargo, su impacto ha sido profundo. De acuerdo con su directora, “la cultura ha cambiado en Santiago, porque lo hace por naturaleza, y el Centro León forma parte también de esos cambios porque ha sumado a la ciudad y la región una nueva oferta cultural y educativa a las ya existentes”.

“Diría que nuestros programas expositivos y de extensión cultural constituyen respuestas a las necesidades y demandas culturales de la ciudad, la región y el país”, agregó.

Educacion

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Ahora bien, su huella no solo se ve reflejada en el ámbito cultural, sino también en el atractivo turístico en que se ha convertido a nivel nacional y las oportunidades laborales que ofrece a los dominicanos.

De manera general, “el Centro León se ha integrado de manera activa y comprometida a los esfuerzos que, desde la ciudad, se están haciendo para convertir a Santiago en un destino importante de turismo cultural y en una ciudad que potencializa y diversifica la artesanía y las industrias creativas”, explicó María Amalia.

También detalló que la institución tiene presencia en la directiva del Clúster Santiago Destino Turístico, brinda acompañamiento al Consejo para el Desarrollo Estratégico de Santiago (CDES) y apoya iniciativas culturales del Ayuntamiento de forma activa y comprometida.

El atractivo de las exposiciones

Las exposiciones en el Centro León se manejan de manera permanente y temporal. Al visitar el lugar, los usuarios tendrán siempre la oportunidad de descubrir lo que tienen para ofrecer las salas: Signos de identidad, Huella y memoria, así como Génesis y trayectoria.

En cambio, hay otras que solo algunos afortunados tienen la dicha de dejarse seducir por lo que tienen para brindar porque su tiempo es limitado. Actualmente, en una de sus salas se alberga la exposición individual “Happy: ensayos sobre la obra de Jorge Pineda”, la cual, por sí sola, es suficiente para cautivar a cualquiera que visite el museo.

Sobre este tema, una de las principales interrogantes es, ¿cuáles son los criterios y procesos que utiliza el centro para seleccionar las exposiciones temporales que se llevan a cabo en sus instalaciones?

María Amalia León detalló que “las exposiciones constituyen un imprescindible recurso de puesta en valor, pero también resultan una atractiva oferta cultural y un efectivo mecanismo dinamizador de la relación con los públicos”.

Resaltó que los criterios de programación incluyen muchas variables a considerar, pero algunas de estas son: la necesidad de propiciar la puesta en valor de las colecciones, en la medida en que las mismas se van catalogando, estudiando e integrando a proyectos o discursos expositivos. Asimismo, con cierta frecuencia, reciben propuestas que provienen de colaboraciones institucionales o de artistas y promotores.

Añadió que “son resultado de factores relacionados con la previsión y manejo de un sistema de producción que abarca el diseño y producción de la museografía, la negociación y gestión de contratos de préstamo, seguros y transportes, cuando se requieren, y la disponibilidad de equipos de trabajo”.

Al inaugurar las exposiciones, no todas reciben la misma atención por parte de los usuarios. En ese sentido, hay algunas que han sobresalido más allá de lo esperado y se han convertido en hitos. Algunas de estas han sido: “Nos vemos en el play”, “Ser Oscar de la Renta”, así como “Happy: ensayos sobre la obra de Jorge Pineda”, que aún sigue disponible para el público.

Lo mismo ha sucedido con algunos programas y proyectos de extensión, donde se destacan Mi barrio está en Navidad y el Carnavalito, “dos momentos anuales de muy alta participación e interacción de los públicos”, según León.

“Yo diría que en las exposiciones, aunque de diferentes maneras, los públicos se han sentido reflejados en sus temas y les ha permitido satisfacer la curiosidad de mirarse en los espejos que muestran la dominicanidad desde diferentes facetas”, opinó sobre la razón de por qué estas exposiciones han captado tanto interés.

Programas educativos

Es importante resaltar que el Centro León no solo se preocupa por las exposiciones, sino que también intenta poner su granito de arena para fomentar el conocimiento y la apreciación del arte y la cultura entre las nuevas generaciones, que, en la mayoría de los casos, son las que menos muestran interés por estos tópicos.

Tal y como se mencionó antes, la oferta cultural de la institución cultural se crea en torno a los públicos prioritarios y los tres campos temáticos de interés: creatividad, identidades y habitabilidad.

En ese mismo orden, “se promueven los intercambios apoyando actividades de educación, animación y fortalecimiento para el desarrollo de la creatividad a través de actividades que propician la reflexión, el intercambio de ideas y otras con carácter lúdico y recreativo”, externó la presidenta de la fundación.

El Centro León concibe y ejecuta tres tipos de programas: los de educación y desarrollo de la creatividad, los de identidades dominicanas en su contexto caribeño y latinoamericano, además de aquellos relacionados a la habitabilidad y convivencia.

Los que promueven la educación educación buscan desarrollar en los participantes la capacidad para establecer diálogos crítico-reflexivos sobre temas de interés, mientras que los de identidades permiten intercambiar experiencias y conocimientos sobre el rol de las tradiciones y costumbres como portadoras de los valores simbólicos y de las prácticas cotidianas de sus habitantes.

Por su parte, los programas de habitabilidad y convivencia promueven la sensibilización de las comunidades por la mejora de su propio entorno y fomentan la protección y correcta utilización de los recursos naturales.

Desafíos

Durante los casi 20 años que tiene la institución han sido muchas las experiencias positivas, no obstante, como cualquier otra cosa en la vida, varias piedras se han atravesado en el camino, las cuales se terminaron convirtiendo en desafíos con los que día a día hay que luchar y superar.

De acuerdo con María Amalia, “uno de los principales desafíos que hemos abordado se relaciona, justamente, con el hecho de que la labor de promoción y difusión que realizamos no tiene un alcance solamente regional”. Y es que el Centro León es una institución cuya gestión se concibe para satisfacer las necesidades culturales de todos los dominicanos y para proyectar el arte y cultura internacionalmente.

En pocas palabras, “nuestros programas, proyectos y actividades se conciben desde lo nuestro local, con una visión nacional y proyección internacional”.

De igual manera, hay que tomar en cuenta que el museo vivió la llegada de la era digital y los cambios radicales que trajo consigo la pandemia. “Desde temprano, el Centro León asumió las tecnologías de la información y la comunicación en sus procesos internos. Son diversas las herramientas digitales que apoyan el trabajo museográfico y la puesta en valor de objetos, colecciones y fondos que la institución custodia”, dijo León.

Aunque para ellos es imprescindible el uso de las plataformas digitales para promover y difundir el quehacer de toda la institución cultural, su tarea fundamental sigue siendo la misma: atraer a los públicos al museo.

Con miras al futuro

Según la presidenta de la fundación y del centro cultural, los planes para seguir participando en el desarrollo cultural del país pueden resumirse de esta manera: consolidar la gestión de sus colecciones, fortalecer la educación como eje transversal en todo su accionar y el fortalecimiento de una plataforma de relaciones institucionales de amplia proyección internacional.

Para eso, la institución piensa enfocarse en la consolidación de las funciones esenciales de un museo, las cuales son conservar el patrimonio, investigarlo para la producción de conocimientos, difundirlo, comunicarlo y democratizarlo en función del desarrollo de la nación.

“Al hablar de planes, no podemos dejar de mencionar que el Centro León se encamina a extender su presencia y quehacer cultural a Santo Domingo, mediante una extensión en ese territorio cultural que es Ciudad Colonial y poder sumarnos a los discursos históricos y culturales de las instituciones que ya están establecidas allí. Esa extensión del Centro León funcionará en el edificio patrimonial de la calle Las Damas 42”, concluyó.

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