Hospital Robert Reid Cabral mantiene disminución de consultas incluso después de fiestas decembrinas

Conocido por ser uno de los pilares de atención a salud pediátrica del país, el Hospital Infantil Dr. Robert Reid Cabral informó que durante las festividades navideñas e inicios de año ha mantenido un porcentaje relativamente bajo en comparación a años anteriores.

A pesar de que el área de emergencias mantiene el mismo ritmo de ingreso, con una asistencia de 15 y 20 niños diariamente Mabel Jones, directora del centro, indicó que han mantenido una estricta supervisión que garantiza el abastecimiento de insumos y medicamentos ante cualquier eventualidad.

"La mayoría de los casos atendidos en emergencia corresponden a patologías respiratorias, como bronquiolitis y neumonía, además de pacientes falcémicos con crisis de dolor", manifestó Jones.

Incitó, además, a los padres y tutores a que mantuvieran al día el esquema de vacunación de los niños, a tomar precauciones en el hogar para evitar accidentes domésticos, como quemaduras, fracturas o descargas eléctricas, y a que acudieran de inmediato ante cualquier signo o síntoma de alarma para un diagnóstico temprano y adecuado.

Al mismo tiempo, el hospital explicó que, aunque algunas especializaciones salían de circulación por las festividades, en este caso todo se mantuvo normal y pudieron brindar el servicio continuo al público.

Servicio a pacientes                                                                

Con respecto a las atenciones brindadas a los usuarios, muchos expresan sentirse cómodos con el tratamiento recibido y la comprensión hacia sus familiares ingresados; sin embargo, uno que otro manifestó su descontento con el servicio.

Tal es el caso de Rosy Melinda, quien en disgusto comentó que ha estado tres veces para atender a su hijo constipado (estreñimiento) y “cada vez que cojo cita con una doctora, nunca esa doctora está”.

Aunque ha podido ser consultada por otros doctores, expresó que esta es su tercera vez que viene desde la provincia de San Juan y aún no ha podido encontrar solución al mal que afecta a su niño.

"María", por su parte, visita por segunda vez el sanatorio desde Baní, con su niño de 11 años de edad diagnosticado con falcemia (condición hereditaria que afecta a los glóbulos rojos), y aseguró que "es uno de los mejores" lugares donde le han dado tratamiento a su condición y además lo considera accesible a su situación económica.

Yoli Vargas, abuela de un menor con condiciones especiales, ha estado trasladándose desde La Ciénaga durante nueve años para recibir atención médica. 

Relató a este medio que, aunque el tiempo de espera para consulta puede variar, siempre ha podido contar con la atención personalizada de los doctores y un tratamiento adecuado.