Especialistas piden revisión a la ley de tránsito y evitar el doble tributo a los mayores de 65 años

Ante la disposición del Instituto Nacional de Tránsito y Transporte Terrestre (INTRANT) de limitar a dos años de vigencia las licencias de adultos mayores a 65 años, han surgido voces que consideran la situación como un doble tributo, pues lo normal es la renovación al cabo de un cuatrienio.

Lo propio llega a ser considerado violatorio a la Constitución por expertos, recordando lo establecido en el artículo 39 sobre que “todas las personas nacen libres e iguales ante la ley, reciben la misma protección y trato de las instituciones”, así como lo contenido en el 57 donde se señala que “la familia, la sociedad y el Estado deben trabajar en conjunto para proteger y asistir a las personas de la tercera edad”.

Es la interpretación de estos textos lo que lleva a Misael Valenzuela, abogado especialista en legislación de tránsito y transporte, a calificar las medidas como inconstitucionales e invita a aplicar exámenes a modo de alternativa.

“Es inconstitucional que a una persona porque sea mayor a los 65 años se le cobre el doble para su licencia de conducir o se reduzca su duración de cuatro a dos años; contrario a cobrarles más, deberían cobrarles menos”, dice el jurista a Listín Diario luego de desglosar lo dictado en la Carta Magna.

Hace guiño a la sentencia número 0005/2020 del Tribunal Constitucional, que cambió la jurisprudencia con relación a la libertad de trabajar y la presunción de ineptitud, por lo cual, en las palabras de Valenzuela, “porque una persona sea mayor de edad no significa que no tenga las condiciones óptimas”.

De ahí que recomiende un sistema de fiscalización que consistiría en la evaluación de las aptitudes de adultos en ese rango de edad, lo cual determinaría la renovación o no de los documentos.

“El INTRANT simple y sencillamente está facultado para darle un nuevo examen a los fines de la renovación: venga, examínese y vamos a ver cómo están sus condiciones y reflejos”, dijo Valenzuela. “Eso debe aplicarse no solo para ellos, sino para cualquier persona”, añadió.

El experto invitó a conocer las estadísticas de accidentes de tránsito y ver la incidencia que tienen los envejecientes en los mismos, además de cuestionar que frente a otros -como los motociclistas- no se realicen inspecciones e inciden más.

Una voz más crítica

En tanto que la también abogada y especialista en Seguridad Nacional, María Taveras, entiende que el problema es mucho más agudo y empieza en la primera licencia, catalogando este proceso como “muy simple”.

Recuerda que existe un mecanismo de chequeos psicofísicos establecidos en la Ley 63-17 de Movilidad, Transporte Terrestre, Tránsito y Seguridad Vial, pero que el mismo está limitado a estudios de audición y visión, además de no ser un reglamento presente en la Ley 114-99 relativa al Tránsito de Vehículos.

Taveras recomienda revisiones a la citada Ley 63-17, en virtud de que “cuando una persona fuera a gestionar una licencia de conducir, fuera obligatorio recibir un mínimo de 20 horas de Educación Vial, pues es una forma de conciencia sensibilizar al ciudadano y es una de las mejores herramientas que tiene la seguridad vial”.

Recomienda que la materia de Educación Vial sea impartida tanto a nivel público en la Escuela Nacional de Educación Vial, como a nivel privado por las Escuelas de Choferes, teniendo la base de los cuatro manuales de tránsito que rigen al país para cada categoría. “Nadie se preocupa por aprender la normativa”, se quejó.

En lo relativo a la renovación de las licencias en adultos mayores, pronuncia que “se entiende que a partir de los 65 años, y lamentablemente, ya la persona va perdiendo facultades, no es lo mismo”. De ahí que exprese que no es inconstitucional el estatus de sus renovaciones actuales, sobre todo porque “no se le prohíbe conducir ni ir en la parte delantera del vehículo”.

No obstante, manifiesta que el impuesto a los envejecientes que acudan a renovar la licencia debe ser de menor cuantía para este grupo de ciudadanos, aunque a estos se les recomienda que “no conduzcan de noche, ni en vías con tránsito muy congestionadas”.

El director del Intrant, Milton Morrison, informó que revisará las condiciones actuales que obligan a que los mayores de 65 años solo tengan vigencia en la licencia por dos años, obligándoles a pagar el doble de dinero para obtener el documento en un periodo de cuatro y con relación a un ciudadano que se ubique entre los 18 y los 64 años.