Sobreviven sin acceso al agua

Pese a que el proyecto Nuevo Domingo Savio dio a la zona una nueva imagen, la ineficiencia en los servicios básicos son un problema latente que afectan a decenas de familias en Los Guandules, quienes han tenido que aprender a sobrevivir con escasez de agua por un deficiente sistema de distribución.

De acuerdo a comunitarios, desde hace cuatro años parte del barrio enfrenta una precaria distribución del agua, en el que tienen acceso a tan importante recurso solo dos veces a la semana por un tiempo muy limitado.

Las personas que residen en la parte superior del referido barrio tienen acceso al agua los días martes y sábados por solo dos horas, tiempo que utilizan para llenar los tinacos, quienes cuentan con uno, u otras vasijas para de esa manera, almacenar agua, poder realizar los quehaceres del hogar y sus necesidades. Los dirigentes de la comunidad relataron que la Corporación del Acueducto y Alcantarillado de Santo Domingo (Caasd), designó un empleado que tiene como encargo abrir una llave de paso para que el agua llegue a los distintos puntos del barrio, pero que esta persona solo abastece a su vecindario.

Ante esto, durante los últimos meses los moradores de la calle La Esperanza y 11 A, han tenido que comprar agua y hasta utilizar el agua potable para poder asearse. Ricardo Yamil, presidente de la junta de vecinos de Ernesto Valdez dijo que han denunciado esta situación en varias ocasiones con la Caasd, pero sus reclamos no han sido escuchados.

“Nosotros que vivimos en el parte más alto, no nos está llegando el agua. Se nos ha prometido que se nos va a resolver, desde hace seis meses”, dijo Ricardo Yamil.

Para abastecerse muchos deben recurrir a pagarle a personas que poseen pozos tubulares y así almacenar agua para unos días.

“El que no logró coger agua el sábado alquila una manguera por dos horas y llena su tanque. Nosotros necesitamos que nos ayuden con el problema del agua de la calle 11 A”, afirmó Ricardo.

Mientras que, otros representantes de juntas de vecinos comunicaron su descontento por el poco tiempo y la baja presión del agua.

“Hacemos un llamado a la Caasd para que, si pueden y centran con los recursos, nos pongan un tanque e Los Guandules arriba, que sería una solución para la distribución del agua”, expresó Hilda, una de las miembros de la junta de vecinos.

Asimismo, los habitantes de la calle Alberto Ramírez explicaron que no tienen acceso al agua, por lo que hacen un llamado a las autoridades para que las tuberías sean repuestas y decenas de personas que viven en esa área pueden tener una vida con menos precariedades.

RD$700 mil para resolver

Jorge Hernández, quien es presidente de la Junta de Vecinos de El Dique, indicó que lo recomendable en Los Guandules es instalar un sistema de bombeo, a través del cual el agua podrá ser distribuida en todos los puntos del barrio y con una mayor presión; con esta medida se estaría solucionando esta problemática que durante años ha estado afectando a cientos de familias.

Según narró, para realizar esto necesitan comprar un terreno, el cual será utilizado por la Caasd para instalar el sistema. Sin embargo, las juntas de vecinos no cuentan con recursos suficientes para lograr este cometido, por lo que solicitan una mano ayuda para poner fin a la escasez de agua.

“Si hay voluntarios que nos ayuden a comprar ese chin de tierra, porque nosotros no tenemos el dinero”, exclamó Hernández.

700 mil pesos es el monto que necesitan para comprar el terreno y establecer el sistema de bombeo que beneficiara a mas de 3,000 personas en el barrio. Contó que luego de adquirir el terreno, este sería entregado a la Caasd y posteriormente el proyecto se pondría en marcha.

“Estamos pasando la de Caín, a sabiendas que aquí todo el mundo compra agua de botellones, pero es para bañarse, para fregar y otros consumos”, sostuvo Jorge.

Cloaca y la salud

Otra denuncia que según la junta de vecinos ha quedado en el vacío es la de dos cloacas que están a la intemperie, las cuales provocan un fuerte mal olor y atentan contra la salud de las familias que viven en los alrededores.

“Ayer yo pasé por ahí y yo quería volar porque yo no aguantaba el mal olor”, manifestó Ricardo Yamil, presidente de Codegua.

Los vecinos temen que esta problemática pueda causar graves problemas en la salud de sus hijos, pues contaron que un menor de edad cayó en una de las cloacas y fue socorrido por personas que estaban en el área.

“De esto hemos hecho vídeos, lo hemos mandado a las autoridades, lo hemos hablado en la Caasd y no tenemos una solución”, explicó.