La Sánchez en estado de alerta rojo
En tanto los dominicanos seguimos sufriendo los embates del precario sistema semafórico de la ciudad con sus consecuencias económicas y de salud, en el interior del país crece el descuido y desconocimiento de una penosa realidad.
Me referiré en particular a la Carretera Sánchez. El 30 de noviembre del año 2021, el INTRANT en su condición de rector de la movilidad terrestre y su seguridad en la República Dominicana emitió la Resolución 003-2021 con el objetivo de mejorar la cadena de suministro, el medio ambiente, la movilidad segura en el Distrito Nacional desde el Puerto de Haina Oriental.
11 kms. de vía especializada para la logística del transporte que conectaría al Muelle Oriental de Haina con la Av. Tito Mella por la Autopista 30 de Mayo. Esta iniciativa estaría a cargo de una serie de instituciones que planificarían, coordinarían y desarrollarían una serie de trabajos para la viabilización del proyecto que ya tiene cerca de 3 años en ejecución. Sin embargo, viene presentando una visible debilidad en la supervisión, fiscalización y controles por falta de agentes de la DIGESETT, de manera específica. Para el cumplimiento de los objetivos sería muy difícil sin la participación a toda hora y todos los días de este último componente mencionado. Dicha situación por incumplimiento propicia alto riesgo para los usuarios que por allí transitan.
El documento deja abierta la posibilidad de ampliar la conectividad viaria, por lo cual sugerimos su aprovechamiento para su extensión. El complejo portuario e industrial hacia Nigua demanda una ampliación del corredor en la periferia de la zona urbana para no usar el tramo de la Carretera Sánchez después del Puente Presidente Troncoso que une la provincia de San Cristóbal con la de Santo Domingo, tras cruzar el peaje y viceversa.
Vale la pena repensar la movilidad en esas inmediaciones por la gran cantidad de siniestros escenificados entre el puente y la ciudad de San Cristóbal que consternan a la sociedad en general por la magnitud de los hechos.
La Carretera Sánchez con el flujo vehicular disruptivo que la caracteriza demanda sea de por lo menos de tres estrellas para reducir las víctimas por accidentes de tránsito. Tratamiento que también merece la Autopista 6 de Noviembre luego de realizarse una rápida auditoría de seguridad vial.
Asegurar la movilidad en la primera provincia sureña es una prioridad nacional para lo que el gobierno debe invertir sin escatimar esfuerzos porque son comunes las historias de dolor en la población.
Otro problema neurálgico que nos obliga mencionarlo en esta oportunidad, es la evasión del pago por concepto de peajes y recorridos por la Circunvalación Santo Domingo como práctica frecuente de los vehículos de carga a lo largo de la ruta Manoguayabo – El Carril, acción que mantiene en incertidumbre y tensión a sus moradores, ocasionando por demás daños progresivos a la infraestructura vial.
En este trayecto también se observa el funcionamiento de varios centros educativos, por lo que se empeora la seguridad en el tránsito. Poner atención a esta distorsión iría en consonancia con el recién anuncio del Director Ejecutivo del INTRANT de asegurar el entorno escolar adecuadamente.
Intervenir el tramo de la Carretera Sánchez por Quita Sueño de parte de los organismos competentes no es una locura. Las estadísticas de tragedias de los últimos años sugieren declararlo en estado de alerta para una pronta reingeniería y vigilancia permanente del tráfico. En especial del transporte masivo de pasajeros y de mercancías.
Tampoco sería locura contemplar una segunda etapa del Corredor Estratégico Haina que incluya una de las zonas más productiva del país como lo es la parte Occidental de Haina, cuya competitividad se ve afectada por las condiciones deplorables de las vías.
Ello significa atender una acumulada deuda social en la demarcación con un rediseño adecuado de los caminos que en la actualidad son de alta peligrosidad para los vecinos.