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Calor, humedad y polvo de Sahara producen resequedad de los ojos

El ojo seco produce sensación de cuerpo extraño, lagrimilla o incluso como que se tiene una pajita, sin tenerla, por lo que “obviamente”, tiene que lubricar mas seguido, para tratar de disminuir estos síntomas.

En la consulta con el oftalmólogo pediátrico el examen se realiza de diferentes formas, según la edad del niño y también de su cooperación durante la consulta.

“Actualmente en las consultas, ese es el motivo principal por el cual el paciente asiste”, es lo que afirma la oftalmóloga Cristal Manzanillo, al referirse al ojo seco y la problemática que representa por su excesiva presencia entre los habitantes del país, pero ¿qué produce el ojo seco?

De acuerdo con la doctora, el calor, la humedad, el polvo de Sahara y otras consecuencias del cambio climático, han aumentado su impacto en el país, provocando en igual proporción un subidón en el padecer del ojo seco. Según explicó, todas esas vertientes que afectan la condición climática hacen que las lágrimas se evaporen más rápido en el ojo, provocando el padecer.

“Cuando la lágrima se evapora, ahí viene lo que es una cáscara inflamatoria que produce el ojo seco”, señaló Manzanillo, al ser entrevistada en el programa Al Punto vespertino, que producen Tomas Aquino Méndez, Ramón Garcia y Martina Espinal, al aclarar que, a partir de ahí, el paciente empieza a sentir sensación de cuerpo extraño, lagrimilla o incluso como que tiene una pajita en su ojo, aún sin tenerla, por lo que “obviamente”, tiene que lubricar mas seguido, para tratar de disminuir estos síntomas.

Recomendaciones

“Hay gotas especiales que van destinadas al tipo de ojo seco que tiene el paciente, pero lo más importante es acudir al oftalmólogo para encontrar qué tipo de ojo seco tienen y dirigir mejor el tratamiento”, afirmó Manzanillo, al asegurar que está prohibido el uso de gotas sin indicación médica, considerando que podría no saberse si están contaminadas o predicha para alguna patología en especial.

Asimismo, manifestó que con ese uso incorrecto, se podrían enmascarar enfermedades, y eso puede traer también otros problemas a futuro.

“Lo ideal es que cada paciente tenga su gota separada y que sea algo propio independiente”, esclareció, indicando además que es un padecimiento que puede presentarse en cualquier etapa de la vida, tanto en niños como en adultos.

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