COE incrementa niveles de alerta verde y amarilla a varias provincias del país
El organismo del tiempo indicó que durante este día se espera que los aguaceros sigan de moderados a fuertes, siendo intensos localmente, acompañados de tormentas eléctricas y ráfagas de viento en diversas provincias del país
El Centro de Operaciones de Emergencias (COE), informó que incrementó los niveles de alerta verde y amarilla a 25 provincias del país por posibles crecidas de ríos, arroyos y cañadas, así como inundaciones repentinas o urbanas.
En ese sentido, la entidad indicó que 13 provincias tienen colocada la alerta amarilla, mientras que 12 demarcaciones tienen impuesta la alerta verde.
Las provincias con la alerta amarilla son Santo Domingo, Distrito Nacional, Sánchez Ramírez, María Trinidad Sánchez, La Vega, Hermanas Mirabal, Monseñor Nouel, Monte Plata, Hato Mayor, Samaná, Duarte, Espaillat y El Seibo.
En tanto, con la alerta verde están San Juan, San Cristóbal, Santiago, San José de Ocoa, Puerto Plata, Valverde, Elías Piña, Santiago Rodríguez, La Altagracia, San Pedro de Macorís, La Romana y Dajabón.
La decisión fue tomada en virtud del boletín de la Oficina Nacional de Meteorología (Onamet) que establece que “un panorama meteorológico con bastante humedad e inestabilidad continúa prevaleciendo sobre el territorio nacional, resultado de la activa vaguada que desde ayer ha generado cantidades extraordinarias de lluvia”.
El organismo del tiempo indicó que durante este día se espera que los aguaceros sigan de moderados a fuertes, siendo intensos localmente, acompañados de tormentas eléctricas y ráfagas de viento en diversas provincias del país.
Recomendaciones
El COE recomendó a la población mantenerse en contacto con la Defensa Civil, Fuerzas Armadas, Cruz Roja, la Policía Nacional y el Cuerpos de Bomberos.
Además, seguir los lineamientos de esas instituciones.
La entidad también indicó que ante la ocurrencia de aguaceros, los residentes en zonas de alto riesgo que habitan próximo a ríos, arroyos y cañadas estén atentos y tomar las medidas de precaución necesarias ante posibles crecidas e inundaciones repentinas.