Diácono invita al presidente Luis Abinader y a políticos a reflexionar sobre sus aportes y misión

Durante la lectura del Sermón de las siete palabras, Blas Bonilla Morfe, diácono de la Parroquia Inmaculada Concepción de esta capital, hizo un llamado este Viernes Santo a reflexionar sobre los aportes que cada ser humano está depositando en la sociedad, incluso al presidente de la República, Luis Abinader y los demás políticos.

En su discurso de la sexta palabra denominada “Todo está consumado” en la Catedral Primada de América, Bonilla Morfe, explicó que Jesús dijo en la cruz del calvario que todo estaba consumado refiriéndose al “cumplimiento de su misión, salvación efectuada y rescate pagado” porque lo entregó todo.

Por tanto, el religioso invitó a los ciudadanos y políticos a reflexionar y a cuestionarse sobre los aportes que están haciendo para lidiar con las problemáticas que imperan en el país y identificar sí realmente, se está logrando el objetivo que se propusieron.

“Tú, Padre y madre de familia, ¿pueden decir a Jesús misión cumplida? Tú, profesional, en tu labor diaria, ¿pueden decir a Jesús, misión cumplida? Tú, obispo, sacerdote y diáconos ¿pueden decir a Jesús, misión cumplida? Tú, empleado público, ministros del gobierno, militares, senadores y diputados ¿pueden decir a Jesús, misión cumplida? Señor presidente de nuestro país, usted puede decir a Jesús ¿misión cumplida?”, cuestionó.

Al continuar con su intervención, señaló que son tantas las problemáticas que hay en el mundo actual, que no se pasar por la vida sin ayudar a transformar esta realidad, para que la plenitud se comience a gestar, dando siempre lo mejor de cada uno de nosotros. “La plenitud no es un punto de llegada, sino una opción de vida, una decisión de entrega permanente y total”, expresó.

Detalló que el país enfrenta momentos difíciles relacionados a las desigualdades sociales, inseguridad ciudadana, alto costo de la vida, desempleo y otros más. “Esta es una realidad difícil y en ocasiones nos sentimos impotentes”, indicó.

Exhortó que Jesús nos llama hoy a orar por estas situaciones actuales y a no perder la esperanza, a comprometernos más y a ser conscientes de que Él estará siempre con nosotros, como lo prometió. “Es momento de valorar el sacrificio de Jesús en la cruz, permitamos que se cumpla en nosotros su Redención. Si todo se cumplió en Él, estamos ahora llamados a que también se cumpla en nosotros”, enfatizó.

Señaló que debemos de tener conciencia de que hay que vivir una profunda conversión de que hay que comenzar a curar en nuestro corazón las llagas y las heridas mismas de Jesús además, las de tantos que a diario sufren de hambre, desesperación, opresión, abandono, tristeza, pobreza, enfermedad y otros sufrimientos.

"Nosotros, hombres y mujeres de Dios, debemos estar dispuestos y comprometidos ante Dios a suplir amor, esperanza, justicia, alegría, salud, alimento, compañía, fortaleza y paz. Quien da estos pasos, seguro que pasará de la muerte a la vida en Cristo; ese fue el camino a seguir que vino a enseñarnos Jesús”, incitó.

Finalmente indicó, que si la respuesta es afirmativa a estos cuestionamientos, Jesús estará gozoso de que hayan cumplido su misión. 

"Si respondemos afirmativamente a estas preguntas, nuestro Señor Jesús que sí pudo decir a Dios

Padre misión cumplida, porque cumplió la misión a la que había sido enviado, estará gozoso de que nosotros estemos cumpliendo con la misión encomendada. Dios nos bendiga", concluyó diciendo.

También resaltó que Jesús nos está invitando este Viernes Santo, a que hagamos suyas sus palabras, a completar con perfección la misión que nos ha encomendado a cada uno de nosotros, para al final poder confirmar que todo ha sido completado, según la voluntad de Dios.

“Jesús, con su muerte, pagó el precio completo de nuestra redención, enseñó a sus discípulos y a toda su Iglesia a aceptar de la misma forma que él lo hizo, una vida llena de pruebas, que pueden ser superadas acercándonos al amor de Dios y cumpliendo su santa voluntad”, rememoró.

También enfatizó en que el Papa Francisco, en una de sus homilías más recientes, ofreció tres consejos para todo cristiano que quiera acercarse más a Dios, el primero consiste en profundizar en los evangelios, el segundo a cargar con su cruz y el tercero, a mantener una fe viva.