La República

J-2, Dicrim, Dicat y COE entre las entidades que tratan de determinar qué provocó explosión en San Cristóbal

Durante la tarde de este viernes fue posible observar como la zona cero del desastre era sobrevolada con un dron por personal del Centro de Operaciones de Emergencias.

Zona cero de la explosión ocurrida en  San Cristóbal Jorge Martínez / LD

Al quinto día de la tragedia que ha cobrado la vida de unas 29 personas, las autoridades mantienen las investigaciones a fin de dar con el origen que produjo una estruendosa explosión en la calle Padre Ayala, en el municipio cabecera de San Cristóbal.

Durante la tarde de este viernes fue posible observar como la zona cero del desastre era sobrevolada con un drone por personal del Centro de Operaciones de Emergencias (COE), entidad a cargo de la respuesta ante la destrucción.

De igual forma, oficiales del departamento de inteligencia del Ministerio de Defensas “J-2” continúan realizando las labores periciales y análisis de elementos.

A estos se han sumado agentes de la sección de videos del Departamento de Investigación de Crímenes y Delitos de Alta Tecnología de la Policía Nacional (Dicat) y el Dicrim.

En tanto que, los camiones y excavadoras del Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC) se mantienen removiendo escombros, cristales y desechos en la zona del desastre.

La rigurosidad y permiso para entrar a la zona del desastre aún se mantiene con cintas amarillas y oficiales del Ejército Nacional custodiando el perímetro.

Los murmullos y cuestionantes de parte de los residentes que se acercan a observar sigue siendo una constante, aún en busca de respuesta a la explosión, que registra 60 heridos, 29 fallecidos y personas que aún son buscadas por sus parientes sin respuesta.

Familiares de las víctimas


Génesis Tejeda le dijo a su esposo Cheirii Vizcaíno que la esperara afuera del Centro Médico Bethancourt en lo que preguntaba si había muchos pacientes en consulta.


El estruendo es estrepitoso y toma por sorpresa a clientes y a propietarios. De un solo soplo se caen cristales y mercadería mientras las personas huyen de forma despavorida.


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