“El tiempo se nos acaba”: 100 mil dólares por la vida de Alina
Los médicos de la joven de 34 años les informaron que el hígado no aguanta un año más, por lo que debe ser trasplantada de urgencia. Sin embargo, este procedimiento no se puede realizar en República Dominicana por “una ley que hay que no permite trasplantes con donantes vivos”.
“¿Cuánto vale la vida humana?”, es la pregunta que Oliver Olivo se hace constantemente al saber que su novia, Alina Díaz, diagnosticada con cirrosis biliar primaria, necesita con urgencia un trasplante de hígado que cuesta 100 mil dólares.
5 millones 600 mil pesos aproximadamente es el valor de solamente la intervención quirúrgica. “Es la parte más difícil que hemos enfrentado en todo este proceso. Es una cantidad muy alta, pero si pones el valor de una vida, es una cantidad pírrica”, expresó Oliver llevando sus manos a su cara y colando los dedos en el lagrimal de sus ojos intentando detener las lágrimas que corrieron por sus mejillas.
“Ella es muy fuerte, tiene muchas ganas de vivir, tiene muchos sueños, y eso le ayuda a crear esa fortaleza”, dice de su amada, que en 2012 fue diagnosticada con esta condición, que es una enfermedad autoinmune que provoca la destrucción progresiva de los conductos biliares.
Los médicos de la joven de 34 años les informaron que el hígado no aguanta un año más, por lo que debe ser trasplantada de urgencia. Sin embargo, este procedimiento no se puede realizar en República Dominicana por “una ley que hay que no permite trasplantes con donantes vivos”.
Olivo explica que Alina se encuentra en la lista de espera de órganos en el país desde 2019, pero para un donante cadavérico la demora es muy larga, por lo que deben viajar a Argentina para realizar el trasplante con un donante vivo.
Esta enfermedad no tiene una cura. “Hemos intentado recaudar, se nos ha hecho tan difícil, se nos está acabando el tiempo, tenemos que actuar bien rápido, no quiero separarme de mi Alina”, expresó Oliver con mucha dificultad, la respiración agitada y la voz quebrada por las lágrimas que salían de sus ojos.
Actualmente, Oliver tiene tres trabajos para poder sustentar los medicamentos de alto costo que Alina necesita, que ascienden a 90 mil pesos mensuales.
A esto se suman los gastos de una dieta especial, transporte privado, citas médicas, emergencias, entre otros.
“Estoica, que se enfrenta a lo que tiene, y es feliz a pesar de; con una alta sensibilidad social, con grandes ambiciones”, es como Oliver define a su amada, quien trabaja como atención al usuario en la Fiscalía de Santiago, “donde ha recibido un apoyo enorme”.
Alina Díaz estudió comunicación social y se graduó con honores. Ahora está inscrita en la carrera de derecho, aunque ha paralizado sus estudios por su enfermedad. Ella sueña con ser jueza.
“Es una joven que ha contribuido a su sociedad como servidora pública, activista por los animales y el medio ambiente, que no rompe las reglas, ni siquiera de saltarse una fila, ni siquiera por su condición, nunca ha pedido que la atiendan antes”, dice Oliver.
Para colaborar con el trasplante que esta joven necesita, su familia tiene una cuenta en GoFundMe, donde se pueden realizar donativos en dólares, donde hasta el día de hoy hay 6,315.00 recaudado de los 100 mil necesarios (https://gofund.me/23dbaa90).
Asimismo, una cuenta de ahorros en pesos en el Banco de Reservas, a nombre de Alina Díaz, no. 0110838955. Tú también puedes ayudar.