Política

Expresidente de la JCE: “Gobierno carece de credibilidad para sentarse con la oposición a discutir un pacto migratorio”

Listín DiarioSanto Domingo, RD

Roberto Rosario Márquez, de la Dirección Política de la Fuerza del Pueblo, descalificó al gobierno para hacer una propuesta de unidad nacional, y para recabar nueva vez el apoyo de los actores políticos de República Dominicana que se mantienen vigilantes en defensa de la soberanía nacional. Al mismo tiempo restó importancia a los pronunciamientos del Presidente Luis Abinader en tal sentido.

Al calificar de electoralista y falso el discurso del Mandatario, en relación al tema migratorio, dijo que “el Presidente que hoy hace un llamado de apoyo y de unidad nacional con este tema, es el mismo que con su firma remitió al Congreso un proyecto de ley que busca establecer un impuesto a los dominicanos, para cubrir los gastos de alimentación, salud, en fin, todos los gatos para la estadía definitiva de inmigrantes ilegales en territorio dominicano”.

El expresidente indicó que ya antes todos los partidos de oposición visitaron el Palacio y apoyaron al Presidente de la República para fijar una posición común, oportunidad que a su entender el Mandatario desperdició y traicionó “este espíritu colectivo de la comunidad política”, al proponer, poco tiempo después, políticas migratorias que implican una renuncia a la soberanía nacional, pretendiendo consignar, en la ley natimuerta, el principio de la no devolución de los inmigrantes en condición irregular.

“Como se ve, el Presidente hace mucho ruido, allanta y se mueve con el tema migratorio, pero no toma ninguna medida efectiva para la protección de la soberanía nacional, ya que cada vez hay más inmigrantes irregulares en territorio dominicano, que ingresan libremente, con la ayuda de funcionarios civiles y militares”, enfatizó.

Sobre el particular, dijo que el mejor de los ejemplos es que los consulados dominicanos en Haití han vendido más de 750 mil visas, incluso estando cerrados, como ocurrió en el período de la pandemia del Covid-19, “sin ningún criterio de vinculación con el Plan Nacional de Desarrollo, sin importar si estas personas califican o no”; dijo que los cónsules han convertido esto en un gran negocio, la venta de visas, las cuales “se comercializan en delivery, en las esquinas, y en motoconcho, como si fuera un producto de un mercado persa”.

Para Rosario Márquez, a esas situaciones expuestas por él, se agrega como agravante, “la práctica paralización de la verjita, que llaman muro”, que no hay forma de concluirla en lo que resta de mandato, y donde se está cediendo a la República de Haití parte del territorio nacional.

“Esta situación de falta de control migratorio, se complicó con el destape del escándalo de corrupción, con la participación de militares y civiles en el tránsito ilícito de personas a República Dominicana, sin que contra estas personas, los demás arriba, los verdaderos responsables, caiga todo el peso de la ley, se confisquen y decomisen las propiedades utilizadas en este negocio ilegal”, agregó.

Para el alto dirigente de la Fuerza del Pueblo, sus consideraciones anteriores demuestran que el llamado del Presidente Luis Abinader respecto al pacto para el tema migratorio, en lo que respecto a los migrantes haitianos, “es un mero recurso electoral”; y consideró que sentarse la oposición a negociar con el gobierno en estas circunstancias, “equivaldría a ponerse de relajo”.

Recordó que el Presidente y el Gobierno han violado todos los compromisos asumidos. Entra estas violaciones sacadas a relucir por Roberto Rosario Márquez, están el caso del Pacto Eléctrico, “donde se comprometió a rebajar gastos corrientes, a rebajar las pérdidas de energía, y a transparentar su accionar”, lo cual no ha ocurrido; y habiendo arribado a un consenso en el Consejo Económico y Social para someter una la Ley del Régimen Electoral, sometió un proyecto de ley, sin tomar en cuenta el conseno a que había arribado en esa instancia.

A su entender, éstas son algunas de las razones por las que no se puede confiar en el gobierno, “que cada vez tiene menos credibilidad”.