Rendición de cuentas y oposición política
El presidente Luis Abinader, en cumplimiento del artículo 128.2.f de la Constitución, como Jefe del Gobierno, rendirá la tercera memoria de su mandato ante la Asamblea Nacional compuesta por senadores y diputados, la última antes de las elecciones generales municipales del 18 de febrero venidero y, la primera de un año sin pandemia ¿Qué dirá en su primer año normal previo al año de las elecciones congresuales y presidenciales?
Es una ocasión solemne para resumir la gestión de sus 24 ministros –cuando Balaguer solo eran 12– en el último año y procurar –del Congreso Nacional– el descargo de dicha gestión, esta vez, con una oposición que responderá.
Siendo que se cumple un año de la Invasión Rusa a Ucrania es obvio que se referirá a ella como motivo de disturbios en la economía local y mundial, particularmente, en los precios de los combustibles y de algunos productos básicos de la canasta; no obstante, retendrá el crédito de un buen crecimiento del PIB de un 4.7%: La Oposición –a pesar de las 52 semanas sin variación en los precios internos–, podría responder que el petróleo de USD$113.01 el barril en marzo del 2022 bajó a USD$81.86 el 24 de febrero del 2023 y que la luz sigue cara.
Le responderán criticando el endeudamiento, que creen excesivo y el aumento de la inflación, que afecta sensiblemente los precios de los productos de mayor consumo de la gente, en particular, comida y medicina, no obstante la ley de exención de impuestos aprobada el pasado año que, aparentemente, afectó mucho a los productores.
Advertirán que para controlarla este año el Gobierno a través del Banco Central y del Ministerio de Hacienda, han retirado una cantidad excesiva de dinero de la calle –a través de la venta de papeles al 16%– encareciendo la tasa de interés para los préstamos, en particular, al consumo, a la vivienda y al financiamiento de vehículos, combinando efectos recesivos en algunos sectores y presionando tangencialmente la inflación: esta política presiona además a los bancos medianos y pequeños que compiten en un mercado financiero oligopólico controlado por los tres bancos más grandes que están captando al 12% en depósitos a plazo y que, encima de eso, el dólar está subiendo.
El Ejecutivo podría insistir en su agenda de reformas, muchas colapsadas por la falta de un clima de “convivencia política” y, en más de un caso, por ignorancia del momento y de la cultura nacional como sucedió con la Ley de trata de personas que supuso un serio revés en las simpatías del Presidente en un tema que, previamente, lideraba con gran aceptación.
El éxito en materia de Educación exhibido en ocasión de la Pandemia, es cosa del pasado; actualmente dicho ministerio es protagonista diario de denuncias sin soluciones a las cuestiones más sencillas, como son la designación de conserjes y la habilitación de butacas y locales básicos para áreas deprimidas: Enfrenta a los profesores y su gremio, a los proveedores, a los autores y editores de textos y, con ninguno llega a soluciones.
En materia de energía –en que Luis se ha esforzado– puede informar la contratación de varias unidades aunque solo la Barcaza de Azua entrará pronto y, el inicio de muchos proyectos de energía no convencional, con la que ya se debe tener cuidado porque se ha sobre aprobado: El Sol, sólo está disponible en el día y el Viento, ocasionalmente; ya no hay capacidad en redes y mercado, para entrar la cantidad que producen sin apagar la térmica y, desde luego esas plantas no se pueden apagar de día y encender de noche.
A pesar de los esfuerzos, Interior y Policía, ante una ciudadanía afectada de inseguridad y delincuencia creciente, quizás no salga bien parada ni siquiera en un tema, como las deportaciones, que en principio la mayoría apoya: Después de inflación y desempleo, es la intranquilidad la siguiente preocupación de la gente.
Turismo es el ministerio de la luz con la llegada de 7.2 millones de visitantes que dejaron USD$8,000 millones en ingresos y el inicio masivo de obras hoteleras a cargo del sector privado y, en este caso, con algunas políticas innovadoras, pero, la oposición le responderá que en ese sector, inversión y trabajo, los desarrolla el sector privado y, posiblemente que, esa área, junto a remesas –por USD$9,856 millones–, han crecido en todos los gobiernos.
Obras Públicas informó recientemente de una cantidad de obras inauguradas por esta Administración y, es muy probable que el mandatario se refiera a eso; esa información fue dada por el MOPC ante la críticas del PLD de que este gobierno “da palazos de apertura de obras” pero no corta cintas inaugurales; entre las obras inauguradas se citaban la Circunvalar de Azua, el Hospital de Villa Hermosa y Turística Gregorio Luperón, puede ser que la oposición responda que las principales, las dejó en proceso de ejecución la anterior gestión.
El esfuerzo del presidente Abinader ha sido evidente en materia de titulación y, un poco, en vivienda como nuevo Ministerio, pero, el PLD podría responderle que pagó los terrenos de un tercio de la ciudad de Cotuí, la mitad de El Puerto, Isabela y Villa Mella, que involucran a más de 50 mil personas y, a estos, a través de Titulación, no les da sus documentos y, la FP le podría reprochar que, años después de donados al cabildo de Villa Hermosa más de 8 millones de metros para titular a los residentes que son decenas de miles, aun no se ha hecho.
Los logros de Cancillería son opacos; se está mejorando el tema de los consulados, pero el fiasco de los pasaportes, cuyas libretas extrañamente se terminaron, no tiene defensa y, en el tema de Haití, el pecado original en materia de migraciones y de declaraciones contradictorias de funcionarios, era previsible. De Medio Ambiente desde el trágico y lamentable deceso de Orlando Jorge Mera, se habla poco y, de Agricultura, que ha mejorado su presentación y, en algunas áreas garantizado la siembra, está afectada por los precios del plátano… no se habla de otra cosa aunque pronto lleguen los baratos.
Industria y Comercio –órgano eminentemente normativo–, si no fuera por las zonas francas que dependen de la iniciativa privada, nadie se daría cuenta si la cierran; supongo que pocos saben el nombre de los ministros de Deportes, Mujer y Juventud y, de varios más, lo que refleja su escasa conexión con la ciudadanía y, no influyen tanto en la ida diaria de la gente Educación Superior y Administrativo.
Cultura, otrora resplandeciente en los gobiernos de Leonel resultó frustratoria en los de Danilo y en el pasado año un fracaso, a pesar del buen don de gente de Milagros Germán: La Feria del Libro del 2022, su principal actividad, es un triste recuerdo entre los escritores y libreros.
En materia de defensa, cuya misión es defender la soberanía, si esta estuviera en peligro, las continuas denuncias en la frontera, que deben ser investigadas y si procede, sancionadas, no afectan tanto su imagen ni eficacia.
Ante la Justicia, Poder al que según el presidente de la SCJ llegan el 90% de los conflictos muchos de los cuales debían resolverse por mecanismos alternativos de solución previstos en la Constitución y en la ley, la Carta asigna a un funcionario del Gabinete, el Procurador, el rol de persecución y aplicación de la política criminal y, ha sido clave en la política de lucha en contra de la corrupción enarbolada por Abinader –que según las encuestas Hoy– preocupa sólo al 3% de la población. Esta, sin embargo, no es más importante que el respeto al Estado de derecho conforme al cual todo debe ser hecho con respeto al debido proceso y al derecho fundamental a la dignidad de la persona, aspectos en que vienen surgiendo, crecientemente, quejas; en este sentido, el Presidente mantiene una postura de no intervención: Pero, la oposición por lo bajo, luego de recordar que el Presidente increpó a la anterior Cámara de Cuentas, que los “informes de auditoría”, altamente cuestionados, fueron hechos por la Contraloría, por gente del PRM, le surgen dudas y crean el germen de alianzas en su contra.
El presidente Abinader –uno de los mejores valorados del área– quien es más popular que su partido, el PRM, es también mejor visto que su gabinete, un equipo que ni siquiera es capaz de ejecutar las partidas presupuestarias que le son asignadas y, por ese motivo, deben relanzar su Administración, algo normal, por su bien y el del país.