Raúl Morilla: “No concibo ni un momento sin el arte en mi vida”
Arte. En 2021, presentó la obra “Agonía de la Memoria” en el hotel Mercedes, una que impresionó a la población en Santiago.
Intérprete visual de lo que le preocupa, traductor de sus inquietudes e interrogantes. Así se define Raúl Morilla, arquitecto y artista plástico vegano que, acompañado de otros dominicanos, realizó “Dominicana Inmersiva”, exposición para la Feria Internacional del Turismo (FITUR) 2023, en enero del año en curso.
Nació en 1972, y creció en el barrio Domingo Savio, de la ciudad de La Vega. “Mi infancia fue, realmente, de ensueño”, comenta el artífice. De sus años jóvenes enfatiza los grandes patios por los que jugó libremente y la bonita vecindad que le brindó una adolescencia sana y divertida.
“Lo es todo; mi universo, mi ser y mi razón de existir”, dice Morilla, a modo de describir esa rama por la que siente especial apego. Este, también, expresa su inquietud por fomentar la educación artística, haciendo alusión a la importancia del arte para sensibilizar a la gente. “Con jóvenes más sensibles, tendremos una mejor sociedad”, expone.
A lo largo de su carrera artística, ha recibido varios reconocimientos a nivel nacional e internacional. Entre estos, está el Premio Igualitario del vigésimo octavo concurso de Arte Eduardo León Jimenes. Cuenta el orgullo que sintió cuando la obra premiada allí, “Agonía de la Memoria”, alcanzó a tocar todos los estratos de la sociedad en la Ciudad Corazón. Se trata de aquella impresionante e inolvidable instalación de 2021, en la que el centenario hotel Mercedes de Santiago de los Caballeros se llenó de luces, de voces, de color, como despertando los recuerdos que sus paredes atesoran.
“Esa activación de la memoria colectiva de un pueblo ante un monumento patrimonial como lo es el Hotel Mercedes realmente tuvo un gran significado para mí y mi carrera”, explica.
Además, le fue otorgado, en 2015, el Gran Premio de la vigésima octava Bienal Nacional de Artes Visuales de Santo Domingo, el premio Instalación del vigésimo segundo Concurso de Arte León Jiménez en 2008, entre otros; y ha visitado varios países del mundo con su obra, como México, Estados Unidos, Cuba, Israel, Puerto Rico, Francia, Portugal y Colombia.
¿De dónde surge su vocación?
Bueno, no te podría decir una fecha exacta de cuando inicio en el arte. Estuve rodeado, en mi familia, de arte todo el tiempo. Mi padre, músico, mi hermana, arquitecta, mi hermano, músico. Mi hermano, Luichy, fue quien me llevó a la escuela de Bellas Artes por primera vez, teniendo yo algunos 5 años, y se encargó de llevarme a diario a mis clases de pintura con el Maestro Lora. Desde ahí empezó mi amor por las artes visuales.
En sus obras, ¿cuáles temas le preocupan e intenta plasmar en ellas?
Siempre tienen que ver mucho con lo humano: exponer la erosión de las relaciones interpersonales, los conflictos de la existencia y nuestra relación con el medio que nos rodea. Trabajo el cuerpo humano como centro de mi narrativa; ese cuerpo como contenedor de memorias, sentimientos y procesos cognitivos. El dibujo, la escultura y las instalaciones me permiten materializar conceptos cuyas lecturas son estimuladas y enriquecidas por el emplazamiento.
Ya que menciona su perfil polifacético, ¿cuál de las técnicas que utiliza es su preferida?
Indiscutiblemente que la video instalación, puesto que te permite utilizar una serie de recursos para poder lograr una mayor comunicación con el espectador de la obra. Hay cosas que quieres expresar en tu obra que el video lo logra, magistralmente, como ninguna otra herramienta artística.
Tiene una extensa trayectoria como arquitecto y las tres vertientes del arte visual ya mencionadas. ¿Qué otro aspecto recalca de su carrera?
A mí me entusiasma mucho la idea de enseñar. Digo, no enseñar, más bien, compartir ideas, por eso he estado impartiendo docencia desde el 2003: un tiempo en la Universidad Tecnológica de Santiago, en la Universidad Católica del Cibao, así como en Altos de Chavón, la Escuela de Diseño. Esta parte me satisfice mucho porque me da la oportunidad de mantenerme fresco de idea y poder tener un panorama más claro y contemporáneo de los pensamientos críticos de la actualidad. Mis clases más que didácticas, son un compartir e intercambiar ideas donde el respeto por los criterios subjetivos prevalece; al final, es lo que nos hace originales e individuales.
En cuanto a las exposiciones que ha realizado, ¿recuerda alguna con especial sentimiento?
Las exposiciones todas tienen sus encantos y le dejan a uno experiencias y vivencias diferentes, pero creo que “Entrando en las afueras”, pieza que presentamos en le duodécima Bienal de La Habana, en una zona sumamente dinámica de día y de noche; compartir con la comunidad y ver como la comunidad colaboró en la ejecución de la obra para hacerla de ellos. Esa experiencia me enriqueció mucho.
Con respecto a su entrega en la Feria Internacional de Turismo (FITUR) 2023, “Dominicana Inmersiva”, de la mano de Banreservas, ¿qué destaca de ella?
Me contactaron, exponiéndome su inquietud de poder llevar una inmersiva a la FITUR, que evocara la dominicanidad, pero desde un punto de vista más artístico y cultural. Hubo varias propuestas y, felizmente, la nuestra fue la elegida, quizás porque nuestro guion y storyboard interesó más y se ajustaba más a sus expectativas.
La idea completa era crearle al espectador una experiencia sensorial inigualable y que pudieran sentir y vivir parte de nuestra cultural en tierras extrajeras, por lo que presentamos videoarte del deporte, el carnaval, la religión, el café, el cacao, el tabaco, la música, las playas, las montañas, y todo lo que nos pueda caracterizar como una nación particular y original.
En cuanto al arte en República Dominicana, ¿cuál es su perspectiva al respecto?
Estoy muy esperanzado en las nuevas generaciones que vienen rompiendo en el arte, con ideas frescas, atrevidas y desenfadadas; tendremos todos que poner atención queramos o no. Con esa experiencia de la FITUR y “Dominicana Inmersiva” me pude percatar, también, de lo lejos que estamos de desarrollar un turismo cultural en una tierra con tantas riquezas culturales y artísticas dignas de ser explotadas para el beneficio de toda una nación. No es como que el estado se encargue de todo, más bien, que incentive y promueva, que valorice el arte nuestro.
¿Qué proyectos tienes en carpeta?
Tenemos en planes una exposición a principio del próximo año en el país, y a mediados de este año en Brasil.
Al igual que unos proyectos de arte público para este año, como es la escultura de “Arte por la Paz” en Santo Domingo, así como la pieza “Cantinela”, a erigirse en la entrada de mi ciudad, La Vega.