Tribunal impone tres meses de prisión preventiva a secuestradores de dos ciudadanos colombianos
El grupo está acusado de cometer los hechos en perjuicio de los ciudadanos colombianos Juan Camilo Trujillo Herrera y Steven Penacos.
El juzgado de Atención Permanente de la Provincia Duarte, impuso tres meses de prisión preventiva en contra de tres hombres acusados del secuestro y tortura de dos ciudadanos colombianos, en un hecho ocurrido en el municipio Pimentel.
El tribunal dispuso que los imputados Eduard Ureña Gómez, alias Blanco, Kilvio Miguel Frías y Esmerlin Rojas Mejía, alias El Zurdo, cumplan la prisión en el Centro de Corrección y Rehabilitación Vista al Valle, de San Francisco de Macorís.
El grupo está acusado de cometer los hechos en perjuicio de los ciudadanos colombianos Juan Camilo Trujillo Herrera y Steven Penacos.
El tribunal tomó la decisión, al acoger una solicitud de prisión preventiva presentada por el Ministerio Público, quien alegó en la audiencia, el riesgo de fuga y de intimidación para los testigos que constituye el imponer otra medida que no sea la prisión preventiva para los imputados.
De acuerdo a la instancia de medida de coerción, las víctimas fueron secuestradas el pasado nueve de diciembre en Pimentel, junto a los también ciudadanos colombianos Alejandro Torres Carrión y Tomás Alejandro Baldemas Rico, quienes lograron escapar de la persecución de los victimarios, huyendo hasta el municipio de Cotuí, donde alertaron a las autoridades sobre lo ocurrido.
Para dejar en libertad a Trujillo y Penacos, los secuestradores exigían la suma de US$ 50,000.00, tras lo cual lograron un acuerdo para recibir US$ 20,000.00, monto que sería entregado en el sector Sabaneta, del municipio de Pimentel.
Los imputados quedaron bajo arresto en medio de un enfrentamiento con la Unidad Antisecuestros de la Policía Nacional, en el que cayeron dos de sus cómplices, identificados como Carlos Humberto Núñez Taveras y Eddy Luis Ureña Ortega, mientras que un tercero logró escapar y se mantiene prófugo.
Al ser rescatados las víctimas presentaban múltiples hematomas, heridas contusas craneales y traumas contusos faciales, producto de las torturas a las que fueron sometidos.