Obispo Jesús Castro Marte dice Benedicto XVI fue un hombre de Dios y militante de la verdad
Jesús Castro Marte, obispo de la Diócesis Nuestra Señora de La Altagracia en Higüey, expresó su sentir respecto a la muerte de Benedicto XVI.
A través de la red social de Twitter el obispo describió al Benedicto XVI como un hombre de Dios, profeta de nuestro tiempo y militante de la caridad.
“Benedicto XVI ha muerto. Maestro insigne de la fe, siervo de la verdad, hombre de Dios, profeta de nuestro tiempo y militante de la caridad, nos deja un camino de vida marcado por la sabiduría, firmeza y disciplina de los santos. El faro de su enseñanza nos seguirá guiando”, comentó Castro en su perfil de Twitter.
Tras la muerte del papa Juan Pablo II, Joseph Ratzinger, nombre de pila del ex papa, se convirtió el 19 de abril de 2005 en el 265° papa de la Iglesia católica? y séptimo soberano de la Ciudad del Vaticano.
Durante su mandato en el Vaticano visitó países como Brasil, Cuba, Australia, Jordania, Israel y los Territorios Palestinos con el fin de participar en jornadas de mundiales de la juventud, que se garanticen "libertades fundamentales" entre otras celebraciones.
Entre sus escritos están su primera encíclica, "Dios es amor", seguida de "Salvados por la esperanza", en noviembre de 2007, y "La caridad en la verdad", en julio de 2009.
El tomo de su primera obra "Jesús de Nazaret" fue publicado en 2007, seguido de dos más en 2011 y 2012.
El 11 de febrero de 2013, Benedicto XVI anunció su dimisión con efecto para el 28 de febrero, alegando su avanzada edad y la falta de fuerzas ante los desafíos de un mundo en plena transformación. Asimismo, autorizó que el próximo cónclave de cardenales se reuniera antes del 15 de marzo de ese mismo año.
Ante esto, fue elegido como sucesor de Benedicto XVI, el argentino Jorge Bergoglio, actual papa Francisco.
La última aparición pública de Benedicto XVI fue en la plaza San Pedro del Vaticano fue el 27 de febrero de 2013.
El papa emérito Benedicto XVI murió este sábado a los 95 años tras permanecer varios días enfermo, su funeral está pautado para el próximo cinco de enero de 2023.
Su muerte pone fin a la insólita convivencia de dos papas, los dos con sotana blanca: Benedicto XVI y Francisco.