Madrugan para vacunarse contra la fiebre amarilla
Motivo de viaje. En algunos casos hay personas que llevan tres días haciendo filas en el Centro Sanitario para ponerse la vacuna y poder viajar a Sur o Centroamérica, donde no los admiten sin ella.
Centenas de ciudadanos amanecen tirados en las aceras que se ubican en los frentes del Centro Sanitario de Santo Domingo con el propósito de obtener la vacuna contra la fiebre amarilla.
Muchos proceden del sur, sobre todo de Barahona y San Juan, y todos llegan al centro médico con la esperanza de pasar horas hasta que les toque el ansiado pinchazo que significa, en la mayoría de los casos, el vuelo directo hacia países de Sur y Centroamérica.
Desde antes de las cinco de la madrugada en ese centro médico se vive un panorama de disputas por la “mala organización” al momento de un usuario requerir la aplicación de vacuna por fiebre amarilla.
Según lo reportado por el encargado de inoculación, Alvin Johnson, las dosis se agotan producto del centenar de personas que se presenta en la puerta del centro para intentar recibirlas.
“Nosotros solo colocábamos 10 como mucho, pero a partir de mayo para acá el flujo de personas ha sido inexplicable porque la gente ha estado acudiendo en mayor cantidad”, explicó Johnson.
El titular del área aseguró que han estado recibiendo aproximadamente 400 personas cada día que requieren el suero inmunizador, cuando la capacidad de inoculación es de 80 personas por día. Esto provoca que los ciudadanos comiencen a molestarse por no recibir la dosis.
Tal es el caso de Manuel Figuereo, un joven de 32 años que habló con una periodista del Listín Diario sobre la travesía que ha sido intentar inocularse contra la infección viral.
“Mira, yo tengo tres días amaneciendo aquí para que ellos, cuando quieran acordarse de mí, me puedan vacunar, y déjeme decirles que esos tres días también han sido dos vuelos cambiados de fecha porque no puedo irme sin esa vacuna”, confesó Figuereo quien mañana sábado parte hacia Guatemala.
Luego de esto, con su tarjeta de vacunación en manos, ya pueden volar a otras tierras donde le exigen esa protección contra la peligrosa fiebre amarilla. Los viajes salen costosos: andan por los 3,500 dólares para hacer la ‘vuelta’ y llegar a México, primero, y después a Estados Unidos, la tierra de promisión para muchos latinoamericanos.
Tienen la premura del tiempo: algunos vuelos salen dentro de 48 o 24 horas, y los viajeros deben ser “pinchados” con urgencia.
Motivo del incremento
Este incremento en la solicitud de la dosis se debe a los viajes masivos que se están realizando a Suramérica y Centroamérica, tomando en cuenta que en esos países requieren la vacuna a los viajeros.
El encargado también confirmó que debido al aumento de personas atendidas, se agotó la cantidad de dosis recibidas la semana. Por tanto, las personas deberán esperar hasta esta semana para recibirla.
Fiebre amarilla
La fiebre amarilla se propaga mediante una especie de mosquito común en ciertas áreas de África y América del Sur.
Es recomendable vacunarse antes de viajar a esas regiones. Los casos moderados causan fiebre, dolor de cabeza, náuseas y vómitos.
Los casos graves pueden causar trastornos renales, hepáticos y cardíacos fatales.