Negocios confiscados de César "El abusador" tienen realidades distintas
Algunos están desocupados y otros fueron reconvertidos a nuevos negocios.
Vopra, antigua Aqua Club. Foto: Glauco Moquete
Las estructuras donde estaban ubicados varios de los negocios del narcotraficante dominicano César Emilio Peralta "César El Abusador", mantienen realidades diferentes en la actualidad.
Mientras algunas edificaciones están deterioradas y sin vida, otras fueron adquiridas u ocupadas por aparentes nuevos dueños.
En Villa Consuelo permanece casi intacta, pero con claras señales de deterioro la discoteca "Club La Koura", con un detalle adicional, un gran letrero de "se alquila".
Sumado a esto, dentro de la estructura, un poco oculto, se pudo observar la presencia de una persona de seguridad privada, que la vigilaba.
Una situación similar, en el mismo sector de Villa Consuelo, enfrenta "Flow Gallery Lounge" que mantiene una fachada mucho más deteriorada, con daños notorios, corrosión y muestras de abandono.
En el caso de este negocio, no había guardias de seguridad, pero al acercarse al lugar un equipo de este medio, pudo ver como algunas personas de la zona fijaron la mirada y caminaron próximo a la estructura.
También Flow Gallery tenía un negocio de venta o alquiler, que fue en gran parte destruido y solo queda el rastro de un número de teléfono.
Funcionando
Otro centro nocturno del narcotraficante, pero que tiene una actualidad diferente, es el Aqua Club, en el sector de Cristo Rey.
El local cambió de nombre y ahora paso a llamarse "Vopra Club", el cual sigue funcionando como un centro de diversión nocturno, pero se desconoce quien lo maneja.
En el caso de Al Panino, un restaurante ubicando el sector de Piantini, no quedan señales de lo que era y en el lugar abrió otro negocio.
El nuevo negocio, que no presenta un nombre visible, se observa como un centro de dispendio de bebidas o un bar.
Algo en común, y a diferencia de tiempo atrás, es que en las proximidades de ninguna de las estructuras hay agentes policiales o militares custodiando.
El abusador, que se declaró culpable de narcotráfico, accedió a que se confiscaran estos negocios en la República Dominicana.