Protestas se han hecho frecuentes en últimos dos meses exigiendo obras
Las demandas. El reclamo más frecuente en las manifestaciones es de obras viales y servicios básicos.
Al menos 10 manifestaciones pacíficas sucedieron durante los últimos dos meses en diferentes partes del país.
El reclamo de los pobladores de Pimentel, en la provincia Duarte, por el arreglo de sus principales vías y la reparación del sistema cloacal; la construcción de un comedor para almorzar dignamente porque están comiendo “en el piso”, que demandaron los estudiantes del Liceo Milagros Hernández, en Santiago; la marcha que hicieron en Baní (Peravia) en contra de los apagones y la vigilia frente al Palacio por 126 desaparecidos, por mencionar algunas, fueron las protestas que escenificaron algunos sectores.
Estas reuniones estuvieron marcadas por la desesperación y la impotencia de los ciudadanos, en busca de respuestas y soluciones de las autoridades, a las principales problemáticas que los aquejan.
En Santiago
Hace apenas una semana, taxistas y conductores de Uber protagonizaron una manifestación en la ciudad, exigiendo que bajen los precios de los combustibles.
Miembros de la Policía Nacional y agentes Swat dispersaron la protesta con disparos y bombas lacrimógenas. Dos choferes fueron apresados.
También en Santiago, los residentes del sector Los Ciruelitos salieron a quemar gomas pidiendo justicia por la muerte del joven mecánico Misael Luciano, a quien le arrebataron la vida dos desconocidos.
Residentes en Sabana Iglesias, Santiago, desprendieron los medidores de energía y los llevaron a Edenorte en protesta por las altas facturas y contra los apagones.
Otra fue la realizaron estudiantes del Liceo Milagros Hernández, en Villa González, el lunes de esta semana.
Los alumnos exigen la construcción de un comedor para poder almorzar dignamente en su recinto académico, debido a que en la actualidad están comiendo “en el piso” porque no se les permite comer en las aulas.
Además, denunciaron que la comida que están recibiendo es muy poca, ante la alta cantidad de escolares y “se quedan con hambre”.
El la capital
A inicios de septiembre, con pancartas en mano y vociferando consignas, decenas de comunitarios de Brisa Oriental, en Santo Domingo Este, salieron a las calles a protestar por agua potable.
Luego, a raíz de las denuncias, la respuesta fue que “a Brisa Oriental le llegaría agua, después de 20 años”.
Fellito Suberví, director de la Corporación de Acueducto y Alcantarillado de Santo Domingo (Caasd), informó que el problema radicaba en una supuesta válvula que se estaba conectando. En la actualidad, esto no se ha materializado.
Otra manifestación tuvo lugar en la Escuela Guaricano Adentro. Previo al inicio de la docencia, este centro educativo no estaba en condiciones favorables para recibir a los estudiantes a falta de butacas y aulas donde impartir docencia.
Y hace casi dos semanas, el Palacio Nacional se vistió de luces, lágrimas y carteles por la protesta que hicieron los familiares de 126 desaparecidos en todo el país. Los parientes de los jóvenes que salieron un día de casa y jamás regresaron, aún no saben nada sobre ellos.
Duarte
Otra de las protestas nuevas pasó este lunes. Los pobladores de Pimentel, en Duarte, quemaron neumáticos y dejaron escombros en las calles en paro por la reparación de sus avenidas y la reconstrucción del parque municipal y el bulevar, edificaciones que se derrumbaron al mismo tiempo, sin dejar espacio para el esparcimiento al aire libre.
Además, piden la reparación del sistema cloacal y el alcantarillado, asegurando que los trabajos están casi paralizados porque “se está trabajando lentamente”.
El senador de la provincia, Franklin Romero, prometió que entregará las calles en enero de 2023 y el sistema cloacal en 12 días, al participar en una reunión en el Centro Comunal de Pimentel, donde escuchó las peticiones que hicieron los lugareños, quienes concluido el encuentro continuaron incendiando gomas.
Peravia
Otra de las manifestaciones sucedió en Baní, donde decenas de organizaciones comunitarias y comerciantes marcharon en contra de los prolongados apagones y las altas tarifas eléctricas a los que han estado sometidos.
Los manifestantes expresaron que “Baní está cansado de la molestosa tanda de apagones que se repiten por cuatro y cinco días a la semana, y que se prolongan hasta por ocho y 13 horas”.
Antes de la protesta, el administrador de Edesur, el ingeniero Milton Morrison, se reunió con los banilejos y habría explicado que “los apagones tenían que ver con trabajos de sustitución de redes eléctricas en Peravia, junto a otras correcciones para mejorar el servicio”.
Morrison habría pedido, también, que le dieran tiempo hasta el 30 de noviembre, para terminar con los trabajos y con estos darle fin a los apagones en esa ciudad.
Bahoruco
A inicios de septiembre, los comunitarios de la sección Panzo, en Neyba, se aglutinaron para exigir la reconstrucción de la carretera Neyba-El Aguacate, cuyos trabajos comenzaron en el 2012 y no se han concluido.
Esta infraestructura vial se realiza a través de la Unidad Técnica Ejecutora de Los Proyectos Agroforestales (Utepda), y aunque el gobierno ya ha cmejorado una serie de importantes carreteras y caminos interparcelarios en las montañas de Bahoruco, la “más importante está paralizada”.