Política

A Macarrulla al parecer le tenían “el agua puesta”

A Macarrulla al parecer le tenían “el agua puesta” desde mucho antes, tanto en las esferas internas del Partido Revolucionario Moderno, PRM, como en las exteriores que lo veían demasiado burgués para el puesto, cuyo enorme presupuesto le permitiría impulsar proyectos

El ministro Lisandro Macarrulla pidió una licencia al presidente Luis Abinader. Archivo/

Guarionex RosaSanto Domingo, RD.

La salida por licencia del ministro de la Presidencia, Lizandro Macarrulla, uno de cuyos hijos aparece implicado en la operación Medusa, que ha hundido el nombre del ex procurador general Jean Alain Rodríguez, daña la reputación del considerado primer ministro a dos años de su nombramiento.

Se cree que los dos primeros años del presidente Abinader podrían servir de plataforma para el grito partidario de su campaña de reelección, pero la implicación de una de las empresas de Macarrulla, encargada a sus hijos para él ocuparse libremente de sus elevadas funciones, cambiaría el panorama.

A Macarrulla al parecer le tenían “el agua puesta” desde mucho antes, tanto en las esferas internas del Partido Revolucionario Moderno, PRM, como en las exteriores que lo veían demasiado burgués para el puesto, cuyo enorme presupuesto le permitiría impulsar proyectos.

Con el anuncio de que ha pedido una licencia al presidente Abinader, el funcionario se arriesga a una larga ausencia y quizás hasta su reemplazo, dado que los abogados anticipan un proceso tan tortuoso que podría consumir buena parte de los más de dos años restantes del cuatrienio actual.

Macarrulla, dirigente empresarial de toda la vida y tenido como un hombre incansable, se estaba ocupando de programas tan importantes como el Nacional de la Vivienda Feliz, los corredores de autobuses y los planes para el desarrollo turístico en Pedernales y Manzanillo, todos para beneficio popular.

Cuando ganó las elecciones el entonces presidente electo Abinader recibió muchas peticiones de los políticos del Partido Revolucionario Moderno, PRM, que querían servir. Como era natural, Macarrulla no estaba entre ellos, pero él había trabajado en la campaña y había sido soporte financiero.

En el PRM se esperaba que uno del partido fuera nombrado en el importante cargo, como ocurrió con el Ministerio Administrativo de la Presidencia, que recayó en José Paliza, el ex senador de Puerto Plata y una de las figuras de futuro en esa organización. El puesto de Paliza lo aspiraba Roberto Fulcar, destinado hasta hoy al complejo Ministerio de Educación.

El presidente Abinader no ha tenido contemplaciones con los funcionarios que se han visto ligados a actos reñidos con las normas. Por eso despidió a Kimberly Taveras, ministra de la Juventud, cuya abultada declaración de bienes se aireó en el programa de Nuria Piera, así como a varios otros.

Al declarar de manera reiterada que la justicia era independiente y que él no se involucraría para favorecer a nadie, Abinader corrió un riesgo calculado de no interferir en los casos que han llegado a la justicia. La mayoría de los temas gruesos ocurrieron en el gobierno anterior y más atrás.

Caso Medusa

El caso Medusa, en el cual se involucra como cabecilla al ex procurador general Jean Alan Rodríguez, destapó el jueves el ingrediente desconocido de que el ex funcionario había contratado a la estratega en comunicaciones mexicana Alejandra Lagunes, quien trabajó para el ex presidente Peña Nieto, para que lo asistiera.

El consejo de asesores de Jean Alain desmintió esa información y la de que el ex funcionario se apoyaría en la experta para lanzar su candidatura presidencial en los pasados comicios, para lo cual le pagó dos millones de dólares en efectivo. Lagunes no ha aclarado la denuncia.

Lo que sí reclamó ese consejo es la presencia en el país del ex jefe de gabinete de Rodríguez, señor Rafael Canó, quien huyó al denunciarse el escándalo y se encuentra en España. Canó era al parecer un enlace entre el ex procurador y muchas figuras públicas a quienes se buscaba conquistar.

El caso Medusa es uno de los peores enredos denunciados en los últimos tiempos. En adición a que está saliendo ahora, se conoce que tras la construcción de la cárcel Las Parras, llamada a sustituir a La Victoria, hubo mucha corrupción en cobros sobrevaluados y elevadas comisiones a contratistas.

Algunos comentaristas de televisión y también el público que ha seguido los acontecimientos, han mostrado alarma e incredulidad por los escándalos y los montos involucrados. El primero que denunció lo ocurrido en Las Parras fue el ex rector Roberto Santana, asesor penitenciario.

Luego denunció que el jefe de seguridad de la vieja cárcel se embolsaba siete millones de pesos semanales. Después de esa denuncia que sacudió la opinión pública, nunca se anunció investigación alguna. Tampoco hubo respuesta a la afirmación del ex rector en cuanto a que el tema carcelario no era prioridad oficial.

Abinader sigue ritmo

El presidente Abinader sigue su ritmo de trabajo y de gobierno sin que nadie lo perturbe. El jueves designó al doctor Miguel Ceara Hatton como nuevo ministro de Medio Ambiente, posición que había ostentado Orlando Jorge Mera hasta que fuera asesinado por un amigo.

Ceara Hatton era el ministro de Economía, en cuyo puesto el presidente nombró a Pavel Isa, quien era viceministro para la Planificación en esa cartera. Ceara Hatton e Isa, son considerados personas honradas y en sentido general de reputación bien ganada. En Medio Ambiente estaba como interina la vicepresidenta Raquel Peña.

El público espera que al cumplir sus primeros dos años en el poder el presidente Abinader introduzca cambios sustanciales en el aparato civil y en los mandos de las Fuerzas Armadas y la Policía Nacional, cuyos jefes duran en los puestos dos años de acuerdo a los reglamentos.

Abinader cumplirá los dos primeros años el 16 de agosto con la satisfacción de haber mantenido la economía en términos satisfactorios, haber atajado la epidemia de COVID-19 y el logro de recuperar el turismo más que los otros países del Caribe que dependen para subsistir de ese negocio.

Desde el punto de vista político, no tiene competencia y con su partido, PRM, en el puño, logró que se borrara de los estatutos el impedimento de la reelección. Las encuestas lo señalan como favorito en la competencia para las elecciones del 2024 sin que la oposición tenga un contrincante seguro. Uno que quiere serlo es el ex presidente Leonel Fernández.