Muchas promesas incumplidas mientras persisten los problemas en la Escuela para Sordoceguera y Discapacidad Múltiple
Se ha dejado al margen las acciones para ayudar a los niños inclusivos.
Cuando el Centro Educativo José Manuel Rodríguez Tavares Sordoceguera y Discapacidad Múltiple inició el año escolar 2021-2022, hace más de siete meses, lo hizo con la promesa de que tendría un nuevo plantel educativo para los niños, y con la idea de que “mientras eso llegaba” las condiciones mejorarían.
Así lo prometió el ministro de Educación, Roberto Fulcar, en septiembre de 2021 cuando salió a la luz pública un video en el que quedaba en evidencia que la casa que sirve como recinto educativo no estaba en condiciones para albergar a los 100 infantes que recibirían docencia, dada las condiciones especiales y particulares de cada uno.
Algunas reuniones e inclusive la designación de una comisión para empezar con su remozamiento, a la cabeza de la directora general de educación especial del Ministerio de Educación de la República (Minerd), Lucía Vásquez, fueron los primeros pasos, sin embargo, al día de hoy no ha tenido ningún resultado.
En la escuela inclusiva persisten los problemas de filtración en las paredes y techos, se pueden observar algunos salones sin puertas o puertas en mal estado, las aletas de los abanicos de techo oxidados y algunos de postes dañados; butacas, escritorios y estantes de libros en mal estado, la cocina deteriorada e inhabilitada, el comedor en mal estado, por mencionar algunos.
“Nos hemos sentido ‘desamparados’, pues desafortunadamente nuestros niños no han recibido el apoyo que demandan, hemos tenido que salir a buscar donaciones para lo más básico y no es justo, nos sentimos burlados de parte de las personas que designó el señor ministro y de la división de Educación Especial”, expresó Gloria Rivera, quien es madre de un niño de 13 años con discapacidad visual, autismo severo, parálisis cerebral infantil y retraso psicomotor.
Otra madre, Anairis Salcedo, aseguró que quien está a cargo y tiene un compromiso con la escuela no está actuando como debería para con los niños.
“A doña Lucía no la queremos aquí… Ella se está burlando de nosotros. Nos dice una cosa a nosotros hoy y mañana hace otra. Ella ahora trabajó con todas las escuelas especiales y dejó fuera la de nosotros. La de los niños de aquí no se menciona en ningún lado. Ella se desmonta, entra por ahí para el Centro de Recursos y no cruza por aquí”, manifestó la madre de una niña de siete años con discapacidad múltiple y sicomotora.
En nombre de todos los padres de familia que tienen a sus hijos recibiendo docencia en condiciones no favorables, Rivera explicó que los niños que están asistiendo son un porcentaje menor del total matriculado (100 niños).
“Están viniendo un 50 %. Los niños que vienen, en su gran mayoría los traen dos días a la semana por falta de espacios y por falta de profesionales. No se pueden recibir todos los días y lo ideal debería ser de lunes a viernes. Ese 50 % se está reduciendo aún más por salubridad, ya que las áreas no están climatizadas y se nos están enfermando por la humedad. Adicionalmente a eso, hay niños en lista de espera que los están enviando aquí desde hospitales como Robert Reid Cabral, porque saben que esta escuela los acoge”, añadió Rivera.
Sólo promesas
El Minerd les prometió a los padres realizar arreglos al centro educativo, sin embargo, los ofrecimientos no se han materializado por completo.
Hasta el momento, la institución sólo ha realizado la entrega de dos aulas móviles desequipadas (padres consiguieron donaciones de Adekoika, la Embajada de Israel y otros, con las que lograron condicionar los salones vacíos), nombró a 25 maestros, pintó una parte de la fachada dentro y fuera del plantel, y arregló con cerámicas el único baño que tienen los niños.
Rivera dijo, de una de las promisiones más recientes, que “instalarían más baños adaptados a los niños con discapacidad múltiples”, dado que el único baño está en un segundo nivel, no le llega suficiente agua potable y es difícil movilizarlos en silla de ruedas hasta allá, pero la entidad no ha colocado ni construido ninguno.
“Hay niños que no controlan la esfínteres (control voluntario que hace el niño de la vejiga y el recto) y hay que estar bañándolos, por ejemplo, mi hijo me vomitó esta mañana porque sufre de epilepsia… yo estoy aquí un poco olorosa porque aquí no hay un baño condicionado para bañarlo. Hay un baño arriba, pero que el agua no llega y uno no puede subir una silla de ruedas arriba (…) los niños con discapacidad motora tienen que quedarse abajo”, dijo una madre, cuyo nombre pidió ser omitido.
En las afueras yacen los materiales de construcción (block, arena y cemento) desde hace un mes para la supuesta construcción de un baño sin que se tenga conocimiento de cuándo estará listo, según los padres.
De igual forma, agregaron que prometieron darle una subvención mensual a la escuela, sin embargo, a la fecha no hay subvención alguna. El mes pasado les fue abierta una cuenta, pero aún permanece en cero.
Además, la entidad prometió otorgar el transporte necesario para el traslado de los pequeños con discapacidad múltiple.
Al escuchar las quejas de los padres, se comprobó que varios de sus hijos se deben trasladar en silla de ruedas y otros por sus condiciones es complicado el manejo en transporte público y las familias, que en su mayoría son madres solteras, son de escasos recursos.
“Estas madres son solteras, no trabajan y no tienen ingresos, y les toca pagar taxis y esos taxis cuestan RD$500 o RD$600 y hasta 1,000 pesos diarios. Ellas hacen el esfuerzo de traerlos, porque esta es la única escuela a nivel nacional que recibe a niños con retos múltiples”, dijo Manuel Concepción, padre y trabajador social.
La promesa que persiste, pero que no se cumple se trata de “la construcción en otro terreno” de una escuela nueva, para hacer de ella un Centro Educativo Integral para Discapacidad Múltiple.
Ana Sánchez, quien está a cargo de la casa fungiendo como directora, externó que los niños no necesitan una escuela convencional, “son niños con retos múltiples que requieren atención personalizada y continua”.
Mucho por hacer
En la actualidad, la escuela José Manuel Rodríguez Tavares Sordoceguera y Discapacidad Múltiple enfrenta grandes retos para que los niños puedan tener la oportunidad de recibir una educación integral y de calidad que van desde el tema de la propiedad de los terrenos con el Patronato Nacional de Ciegos hasta los profesionales.
En cuanto a los terrenos donde opera el recinto, no están a nombre de la escuela, sino a nombre del Patronato Nacional de Ciegos, por manejos desconocidos, aseguró Rivera, quien lleva más de 15 años en la escuela, a la vez que comentó que “le han quitado espacios, reduciéndola a su mínima expresión, donde el Patronato no tiene absolutamente nada que ver con el plantel, pues tampoco recibe ningún tipo de ayuda de su parte”.
Señaló que les quitaron la piscina donde los niños podían recibir hidroterapias y la cancha donde practicaban deporte, que ahora es utilizada como parqueo por el Patronato.
Por otro lado, el centro aún no cuenta con los profesionales que realmente se requieren.
“Sólo se está asistiendo a una parte de los niños ya que los profesionales que se encuentran están sobrecargados y el abordaje de estos niños es personalizado y quienes asisten lo hacen dos veces a la semana. Mientras tanto, los demás están en casa, perdiendo la oportunidad de ir logrando avances camino a su independencia, tiempo valioso que realmente se pierde y duele”, dijo Rivera.
Entorno estructural inadecuado: Una piedra en su desarrollo
La doctora Yecenia Albano, psicóloga clínica infanto-juvenil, advirtió que un entorno estructural inadecuado para niños con retos múltiples puede ser una piedra en su desarrollo.
“Desde el punto de vista estructural, cuando hablamos de entorno si no está adecuado ya de por sí el tener una discapacidad múltiple es un reto, entonces imagina manejarte en un ambiente estructural que no sea el adecuado, eso aumenta el reto para el niño y tenemos que buscar la manera de facilitar… que eso no sea una piedra, sino que tengamos toda esa área funcional de acuerdo a la necesidad de cada niño, para facilitar su desenvolvimiento”, explicó en una entrevista con reporteros de LISTÍN DIARIO.
Albano señaló que eso puede provocar ansiedad, frustración, estrés infantil, baja autoestima y que en un niño eso es demasiado significativo, porque no le va a permitir desarrollarse igual, ni le brindará calidad de vida.
Hasta el Congreso
El presidente de la República, designó a la senadora del Distrito Nacional por el Partido Revolucionario Moderno (PRM) Faride Raful para realizar el presupuesto para construir una nueva escuela, pero ninguna comisión ha hecho nada.
A finales de abril la legisladora sometió una resolución en la que solicita al presidente Luis Abinader instruir al Ministro de Educación a readecuar el centro.
Sobre la Ley General sobre la Discapacidad en República Dominicana
La Ley sobre la Discapacidad en el país establece en su artículo dos que los entornos físicos, las infraestructuras, las edificaciones, los procesos, los bienes, productos, servicios, objetos o instrumentos, herramientas y dispositivos deben ser comprensibles y utilizables por todas las personas en condiciones de igualdad, seguridad y comodidad y de la forma más autónoma y natural posible.