La República

Día de la Tierra: Conciencia ambiental en acción

Todos los recursos naturales que hay en una nación son relevantes porque actúan como un sistema para generar beneficios y servicios a favor de la sociedad. Al final, la Tierra no pertenece al hombre, es el hombre que pertenece a la Tierra. ¡Cuidarla es cuidarnos!

Día de la Tierra

SAIURY CALCAÑOSanto Domingo, RD

No se equivocó el proverbio indio al afirmar que “la Tierra no es una herencia de nues­tros padres, sino un préstamo de nuestros hijos”.

El Día Mundial de la Tierra es una cita que confronta a cada ser humano para que haga concien­cia sobre los problemas ambien­tales y la conservación de la bio­diversidad en un escenario donde los efectos del cambio climático y la sobrepoblación amenazan con la subsistencia del planeta.

Superficies que dan vida

José Manuel Mateo Feliz, es­pecialista en biodiversidad, acla­ra que a pesar de existe una ma­yor conciencia medioambiental, todavía en pleno 2022 hay per­sonas que suelen preguntar ¿Por qué hay que resguardar unos es­pacios terrestres o marítimos, protegerlos, tener personal, fon­dos, y toda una institución que se encargue de eso?

“Es muy sencillo, la vida de la gente depende de los recursos na­turales”, responde el experto.

La mayoría de esos espacios es­tán englobados en el Sistema Na­cional de Áreas Protegidas.

El ambientalista César Vargas las enumera y menciona algunos de sus aportes: el área protegida de Cotubanamá es una zona que tiene un impacto en la economía por la visita de turistas, pero tam­bién en la producción de peces, es una zona de criaderos, de mira­miento de tortugas, de aves y de estrellas de mar.

El Parque Nacional Jaragua es el mayor de todos los parques na­cionales y parte de la Reserva de la Biosfera de la UNESCO, tiene unos 1,600 kilómetros cuadrados e incluye una vasta zona terrestre y marina que incluye playas, la­gunas, bosques secos y cayos.

Tiene el mayor nivel de sende­rismo de la isla, ayuda a mante­ner la zona fronteriza bajo unos criterios ecológicos efectivos pa­ra la producción de agua potable.

La Sierra de Bahoruco tampo­co se queda atrás, es el único bos­que nublado del Caribe. Y junto a la Sierra de Neiba, permite captar las nubes que pasan por allí car­gadas de vapor y que se pueda producir agua para la zona.