La República

Corides, el candidato del burro, es recordado por familiares y amigos

Ángel Corides logró llamar la atención del sector de Los Mina y otras zonas de Santo Domingo con su forma peculiar de ejercer la política.

Funeraria Blandino de la Sabana Larga, Ensanche Ozama, donde fueron velados los restos de Ángel Corides. Foto: Jazmín Díaz/ Listín Diario.

Jazmin DiazSanto Domingo, R.D.

El ex político Ángel Antoine Corides Reynoso falleció la mañana del sábado. Sus restos han sido velados en la funeraria Blandino de la Sabana Larga del ensanche Ozama, donde sus familiares recordaron la manera de hacer política del candidato que montaba un burro.

Ángel logró llamar la atención del sector de Los Mina y otras zonas de Santo Domingo con su forma peculiar de ejercer la política.

“Fiel seguidor de la doctrina de los descamisados y de los pensamientos políticos del partido reformista”, así lo definió su hijo mayor, Ángel Coride.

El político, quien aspiró a síndico por la capital entre los años 70, 80 y 90, estudió Derecho y más tarde Mercadeo para enfocarse en la mercadología política.

Política jocosa

Desde dejarse crecer la barba y el afro hasta utilizar pipas, lentes, cascos, burros y carretas, el ex político tenía una forma innovadora de llamar la atención de los barrios de la capital. Según su familia, utilizaba estas estrategias para escuchar las necesidades del pueblo y pensar en cómo buscarle una solución a través de su propuesta política.

“Era un activista inusual, mientras todo el mundo se preocupaba por una buena foto, mi papá tomaba cartón piedra y dibujaba su propia propaganda, y él mismo la pegaba por los barrios; recuerdo que salía con las mujeres a barrer las calles de Santo Domingo; él no fue solo un político sino también un activista y futurista que se preocupaba por el bienestar del pueblo”, dijo su hijo mayor.

Debido a su simpatía dentro del pueblo fue designado como regidor honorífico en el año 1974 hasta 1978, así mismo desarrolló cargos en el ayuntamiento de Santo Domingo.

Quiso ser síndico durante la década de 1980 a 1990, pero sus aspiraciones no llegaron a ser efectuadas.

“Recuerdo en la época de El Gordo de la Semana que Freddy Beras Goico (1940-2010) llegó a ofrecerle lo que fuera con tal de que le diera una participación estelar, una primicia mejor dicho, pero mi papá siempre se quiso mantener en el anonimato porque eso lo hacía más jocoso y amigo de la gente”, dijo su hijo mayor al recordar una anécdota con su padre.

Como ser humano

“No había una gente de este lado del puente de la 17 para acá que no quisiera a don Ángel, le puedes preguntar a quien sea que haya vivido en ese tiempo y va a decir que ese hombre era bueno, humilde y bondadoso, don Ángel no tenía maldad en su corazón”, así lo define la señora María Cortez, amiga de la familia.

“Un padre excepcional, buen ejemplo y que te impulsaba a ser mejor, y un abuelo cariñoso que le gustaba enseñar y ver crecer a su familia”, así lo definen sus hijos.

Su retiro forzoso

Sus hijos lo “forzaron” a retirarse de la política porque presentó un cuadro clínico hipertenso que padeció desde 2009, y su salud se fue deteriorando conforme pasaban los años, y el estrés lo enfermaba cada día más.

“El ver que a veces no podía ayudar a la gente le mortificaba pero nunca se retiró del mundo de la política porque decía que cuando la política se mete en la sangre no hay quien la saque”, dijo su hijo menor Ismael.

“El hombre del burro” murió la noche del 25 de marzo de un infarto fulminante, tras irse a dormir. Su familia lo definió como el político a seguir y el padre que todo hijo quisiera tener.

La familia de Ángel está conformada por su esposa Silvestra Tapia, y sus tres hijos Ángel, Ángela Mercedes e Ismael de Jesús, además de sus nietos y bisnietos.

Sus restos serán sepultados este domingo al mediodía en el cementerio Máximo Gómez.