EE.UU. elude comentar caso
Manto de silencio sobre retención de yate Flying Fox en el país
La visita de autoridades dominicanas a esta embarcación levantó una ola de rumores dando cuenta allí podrían estar presentes oficiales de la embajada de Estados Unidos.
Autoridades de varias agencias dominicanas visitaron ayer el yate de lujo Flying Fox, anclado en el puerto Don Diego, en Sans Soucí, y vinculado a un multimillonario ruso.
Según fuentes de este diario, la inspección a la embarcación se trató de una “retención” en medio de las tensiones originadas por la invasión de Rusia a Ucrania, que ha producido diversas sanciones de la Unión Europea y los Estados Unidos contra el país euroasiático.
De acuerdo a la información recibida, el Flying Fox, de una longitud de 136 metros de eslora y una manga de 22,5 metros, iba a atracar en La Romana, pero ese puerto no tenía calado y, por esa razón, tomó dirección hacia San Soucí.
Con la visita de las autoridades dominicanas a esta embarcación surgió el rumor de que estuvieron presentes agentes de la Embajada de Estados Unidos en el país. Listín Diario solicitó información al agregado de prensa de la embajada, Gabriel Hurst, para conocer la realidad de esta noticia, a lo que este dijo: “por el momento no tenemos comentarios sobre este tema”.
Debido a la invasión de Rusia a Ucrania, Estados Unidos ha anunciado “sanciones rápidas y severas”, que afectan la economía rusa y a empresarios cercanos al presidente Vladímir Putin.
La última sanción se produjo el jueves cuando Estados Unidos anunció castigos contra la cámara baja del Parlamento ruso (Duma) y 400 figuras y empresas cercanas a Putin.
En esta lista hay 328 legisladores y 48 empresas de defensa de Rusia, que incluyen fabricantes de misiles, helicópteros, drones, munición y equipos militares. Una de las compañías es Kronshtadt, dedicada a la fábrica de drones, que pierden su acceso al sistema financiero estadounidense.
Herman Gref, asesor de Putin desde 1990 y director ejecutivo del Sberbank, el mayor banco ruso, así como el multimillonario Gennadi Timchenko, su esposa y su hija han sido también sancionados por los Estados Unidos. Las sanciones también se han impuesto contra 17 ejecutivos de la junta del banco ruso Sovcombank.
Esta decisión se tomó en coordinación con la Unión Europea (UE) y el G7. La Unión Europea ha impuesto sanciones contra el banco central de Rusia para que no pueda usar sus reservas de divisas en el extranjero y ha limitado el acceso de las entidades rusas a los principales mercados de capitales, prohibiendo el suministro de los billetes de euro a esa economía.
También impuso sanciones contra 877 miembros de la Duma y 62 entidades asociadas.
De igual forma, ha impuesto sanciones al sector energético ruso, que es su principal motor económico y prohibió importar, comprar y transportar productos como tuberías, chapas y alambres.
Detalles sobre la nave
Este yate de lujo lleva por nombre Flying Fox, como se conoce a uno de los murciélagos más grandes del mundo. Fue fabricado por el astillero alemán Lurssen y lanzado en 2019.
Su fabricante incluyó terrazas marinas, plataformas y una enorme piscina de popa, dos “helipuertos gemelos”, área de spa, cine con butacas, un centro profesional de buceo, entre otros espacios. Ofrece alojamiento para hasta 25 invitados en 11 camarotes distribuidos en una habitación principal y el resto de cabinas VIP.
Origen del yate Flying Fox
El Flying Fox, un inmenso yate construido por las empresas Imperial Yachts y Lürssen, vio la luz por primera vez en marzo del año 2019, y es considerado uno de los yates de lujo más grandes del mundo.
Durante un tiempo se desconocía quien era el dueño de semejante obra de ingeniería, hasta que se supo es propiedad del magnate Jefff Bezos. Puede albergar hasta dos helicópteros y cuenta con un casco de acero y una superestructura de aluminio.
Costó US$400 millones.