Descontento en la base del PRM matiza campaña para elecciones internas

Hace pocos días, el Partido Revolucionario Moderno (PRM) cumplió 19 meses a la cabeza del Poder Ejecutivo y ha tenido que lidiar con crisis sanitarias, económicas y hasta con las consecuencias del conflicto bélico entre Rusia y Ucrania, además, de manejar los escándalos y ruidos que volucran a sus compañeros de partido.

A pesar de ello, el problema más constante con el que el presidente Luis Abinader ha tenido que lidiar durante su Gobierno es el descontento manifestando por miembros de la base partidaria.

El último de los episodios, que ha generado disgusto entre las bases, fue que la dirección ejecutiva del partido de Gobierno había decidido que se celebrará una "convención de delegados" para escoger sus autoridades internas.

La propuesta, que fue aprobada en una "convención nacional", ha caído mal entre dirigentes medios del PRM y han encontrado en Guido Gómez Mazara, Eddy Olivares y Ramón Alburquerque sus principales aliados.

La no inclusión del voto universal, además de generar más rechazo entre las bases, afectaría las aspiraciones tanto de Gómez Mazara como de Eddy Olivares, quienes aspiran a la presidencia del PRM y han utilizado ese descontento entre los militantes "de abajo" para solidificar sus respectivas campañas.

Por un lado Gómez Mazara señaló al LISTÍN DIARIO la pasada semana que iría hacia los tribunales a impugnar dicha decisión de la dirección ejecutiva y manifestó que esa decisión refleja el "interés" de la élite del partido en "preservar a sus preferidos sin gozar de la indispensable legitimidad democrática".

"Los intentos de transformar el método de elección de las autoridades, produciendo una regresión vía la convención de delegados es ilegal, inconstitucional y constituye una puñalada trapera a la participación de los sectores populares en la vida interna de un partido, que surgió para garantizar los derechos conculcados en la vieja organización (en referencia al Partido Revolucionario Dominicano)", fue lo expresado por el dirigente perremeista que durante su rueda de prensa donde dio a conocer sus posiciones estuvo acompañado de varias personas de las bases partidarias.

Luego de que fuese ratificada la decisión, Mazara volvió a expresarle a este diario que que impugnará ante el Tribunal Superior Electoral (TSE) y el Tribunal Constitucional (TC), la decisión aprobada por el comité nacional y adelantó que la misma se realizará a partir de este lunes sin especificar la hora, justo antes de exclamar que la aprobación del mismo no le “sorprende”.

Vale destacar que ya el TSE ha desestimado en dos ocasiones el pedimento de anulación de dicha convención y que los nuevos estatutos internos que sí fue aprobado por el voto universal señala la convención de delegados como uno de los mecanismos que pueden ser utilizados para seleccionar

“Pero por favor esos son ellos que creen que pueden burlar a la sociedad (al realizar la reunión del comité nacional), olvídate de eso...todo el mundo sabe que yo voy para los tribunales”, expresó.

De su lado, Olivares reiteró que durante “siempre” ha apoyado la modalidad del voto universal para la elección de la dirección partidaria y que ese es el paso que debe de seguir el partido de gobierno.

“En el caso mío, yo siempre, toda mi vida he defendido el método más participativo en cualquier proceso interno de un partido político. Para la escogencia de los cargos de dirección siempre he apoyado que sea a través del voto universal de los miembros del partido…yo apoyo siempre el voto universal libre, directo y secreto”, manifestó el exmiembro del pleno de la Junta Central Electoral (JCE).

En el transcurso de la semana surgió la información de que el bloque de 22 regidores de la alcaldía de Santo Domingo Este que tiene el PRM respalda la idea de que Olivares presida el partido oficialista.

Otro que se quejó fue el exsenador Ramón Alburquerque, quien manifestó que sería un “descaro” por parte del PRM el aprobar esa modalidad, ya que ellos llegaron “por voto popular”.

Los disgustos anteriores

Tanto Gómez Mazara como Olivares, con sus aspiraciones de presidir el partido hechas públicas, han visitado la mayoría de las sedes de comité de base en todo el país, fomentándose del disgusto de los militantes medios y bajos del PRM; mientras que el exlegislador no ha expresado sus deseos ostentar un cargo pero también se hecho eco de las denuncias partidarias.

Parte de los disgustos anteriores han sido las denuncias por parte de algunos de los miembros del PRM quienes se han quejado por la falta de designaciones para estos dentro del “tren gubernamental” y desde el momento en que la victoria del hoy presidente fue oficializada, los reclamos de diferentes sectores no tardaron en llegar.

Para ese momento, el jefe de Estado y su equipo de trabajo han sido enfáticos en señalar que los cargos en el sector público serán distribuidos por capacidad y “perfil”, no por su filiación política, lo cual trajo consigo un sin número de quejas de parte de aquellos que alegaron que “se fajaron” en la campaña política y que por lo tanto “merecían su puesto”.

En una entrevista con LISTÍN DIARIO el pasado mes de septiembre del 2020, el ministro de la Presidencia, Lisandro Macarrulla, explicaba que la idea es establecer que esta administración gubernamental no anda pensando en filiaciones políticas sino en los aportes que ciertos perfiles pueden hacerle a la sociedad, a través del Estado.

El mismo Alburquerque fue de los primeros en quejarse de la “repartición” de los cargos, ya que en un momento Abinader lo había nombrado como presidente de la Empresa de Generación Hidroeléctrica Dominicana (Egehid) mediante el decreto 339-20, pero lo rechazó, ya que “eso no fue lo acordado”.

“A los amigos que nos felicitan por la designación en la “presidencia ejecutiva” de la Egehid pero sin funciones, agradezco sus palabras, les indico que nunca acepté ya que no fue lo acordado y así como trabajo como nadie con lealtad exijo que se me cumpla”, publicó en Twitter el dirigente político pocos días después de la juramentación de Abinader a la cabeza del Poder Ejecutivo.

Otro descontento sucedió a tan solo días de iniciado la actual gestión, entre varios de los militantes del PRM en la provincia San Juan de la Maguana, luego de que se designara al doctor César Benzán como director regional de salud.

Según varias personas, quienes incluso se presentaron a protestar en la explanada de la Dirección Regional de Salud al momento en que se llevaba a cabo la toma de posesión, quien se merecía el cargo era el doctor Francisco Acosta, también miembro del PRM.

El acto fue seguido de una de las declaraciones más contundentes, ofrecidas por la gobernadora de La Vega, Luisa Altagracia Jiménez Cabrera, quien dijo que ningún “perremeísta quedará fuera, mientras haya peledeístas ocupando posiciones en el Gobierno”.

“Estaremos vigilando a que no quede un solo perremeísta que no tenga lo que se haya ganado en estas elecciones pasadas. Estaremos defendiéndoles, estaremos ubicándoles y estaremos atento de que nadie pueda maltratarlos”, dijo la dirigente del partido durante un acto a inicios de septiembre del año pasado, cuando instó a los dirigentes que están nombrados a que escuchen cada caso, que le abran la puerta, “para nosotros hacer justicia con ustedes que fueron los que sacaron la bandera, trabajaron en los centros de votación, que fueron los que buscaron los votos”.

Otra de las disputas entre dirigentes del PRM ocurrió en el Instituto Agrario Dominicano (IAD), donde le reclamaban al entonces director de la entidad, Leonardo Faña, quien “resolvió la situación” con una medida calificada como cuestionable. La “solución” por parte de Faña fue otorgarles el mismo sueldo a un gerente regional y al subgerente, para no crear enemistades.

“El gerente y subgerente van a ganar el mismo sueldo. Le voy a dar un chance de tres días para que se pongan de acuerdo quién es el gerente y quién es el subgerente y en tres días se ponen de acuerdo van ganar lo mismo los dos”, expresó Faña en un video en las redes sociales.

Asimismo, agregó que otorgaría otros beneficios tras la juramentación de estos dos dirigentes, como gasolina y aparentemente vehículos, tras expresar que “todos los técnicos van a estar montados”.

A pocos días de ser partido oficialista, el PRM se vio en la obligación de suspender y recomendar la expulsión del dirigente Dariel Valdez, luego de participar en una trifulca entre miembros del partido de gobierno en Mao, provincia Valverde.

Un mes después de instalado como mandatario, Abinader se referiría a los reclamos sobre designaciones gubernamentales de algunos compañeros de partido, indicando que el Estado no es un botín político.

“Es normal en una nueva administración que los perremeístas, del partido de gobierno, quieran acceder al poder. Ahora es responsabilidad mía como presidente de que las cosas se hagan ordenadas, y además de que yo soy el presidente, que llegué por los perremeístas, pero soy presidente de todos los dominicanos”, afirmó el mandatario en esa oportunidad.

Eso no causó mucho furor entre las bases del partido oficialista y mucho más después de que este diario hiciera público un reportaje acerca de cómo el Presidente premió con posiciones en el tren gubernamental a aquellos que aportaron económicamente a su campaña electoral.

Como es el caso del encargado de la Tesorería Nacional, Catalino Correa, quien donó para la campaña de Abinader alrededor de siete millones 300 mil pesos, mientras que el director General de Aduanas, Eduardo Sanz Lovaton, registró aportes de otros cinco millones 800 mil pesos.

Los familiares del actual gerente de la Empresa Distribuidora de Electricidad del Sur (Edesur), Milton Morrison, aparecen después al donar en total un millón 50 mil pesos a la campaña del presidente de la República. Uno de los hermanos de Milton, Nelson Morrison, aportó la cantidad de RD$500,000. Mientras que el propio gerente junto a su esposa dieron el total de RD$550,000.

Con las denuncias generando ruido, el presidente del PRM, José Paliza, manifestaría que los miembros de las bases ingresarían al Estado a partir del mes de Abril del 2021; dicha promesa no fue cumplida y los reclamos volvieron a resurgir a inicios de este año, de la mano de los alientos de Olivares y Gómez Mazara, principalmente.