El laberinto que hay que sortear para donar sangre
El 99% de las donaciones de sangre que se realizan no son voluntarias. Todos los donantes que acuden a la Cruz Roja es porque tienen familiares ingresados o amigos.
Sentada en una banca se encontraba la señora Lisbeth Nao, quien había pasado por una travesía en busca de una pinta de sangre compatible a la suya para adentrarse a una cirugía por una masa en uno de sus ovarios.
Perteneciente al grupo O-, Lisbeth narró que desde la semana pasada se encontraba buscando en otros bancos su tipo de sangre y le resultó completamente imposible. Ella asistió el jueves a la Cruz Roja para verificar y ayer, tranquilamente, fue junto a su donante para completar el proceso.
Algunos procesos serían más sencillos si hubiese donantes voluntarios, uno de los puntos a superar en esta área.
Resulta preocupante que el 99% de las donaciones de sangre que se realizan no son voluntarias. Todos los donantes que acuden a la Cruz Roja es porque tienen familiares ingresados o van a donar por conocidos, lo que se denomina donación por reposición o familiar.
Ante ello, Magdalena Núñez, quien labora en el área de prensa, comentó que hay que incentivar la donación voluntaria, y la situación continuará hasta que la gente no se concientice que con una pinta de sangre se salvan tres vidas. “Si no hay donación, no puede haber sangre en los bancos”, expresó.
Alrededor de las 8:38 de la mañana se encontraban muchas personas dentro del lugar, y una de ellas era el joven Alexander Pérez, quien será sometido el próximo jueves a una cirugía del corazón. Para llevarla a cabo, necesita de 15 pintas de sangre, y ayer se encontraba junto a su madre y 15 allegados para buscarla.
En estos casos, cuando las cirugías son de corazón abierto se requieren de 12 a 15 pintas, pero hay personas que llevan 20 donantes y solo logran conseguir 10, esto se debe a que algunas de los donantes presenta inconvenientes o no cumplen con lo que se requiere para donar, por ello, no siempre se les da lo que se espera.
El proceso para realizar una donación sanguínea inicia en la entrada del banco.
En las puertas se encuentra un trabajador encargado de preguntar a las personas sobre qué proceso harán en el lugar.
En el caso de solicitar una pinta de sangre, debe acudir al despacho destinado a ese servicio para que le sea confirmado si hay disponibilidad del grupo sanguíneo que se necesita.
Si hay, se hace una fila para poner en marcha los trámites correspondientes, y en el caso de que no haya, se les recomienda acudir a otro banco de sangre.
Según Magdalena, los documentos que se presentan a la hora de los trámites deben de ser originales. Si la persona tiene seguro médico, debe llevar la cédula, el carné del seguro, el requerimiento de la clínica y el tipo de sangre. Si no va con seguro, solo se necesitará de la identificación y la indicación médica firmada y sellada.
Luego de que sea confirmado que hay sangre del grupo sanguíneo que se necesita, la persona busca a alguien para que este realice el proceso de donación y ofrezca una pinta de sangre.
Proceso del donante Ya después de ingresar y que se confirme que hay disponibilidad de sangre, el donante debe mostrar la cédula y formar una fila para la evaluación a través de un formulario. En este, se le realizan unas preguntas personales y se les toma la presión y el peso.
Después de esta evaluación, que es la primera parte donde se determina si puede o no donar, se envía a la persona al área de toma de muestras para realizarle el hemograma y ver si tiene sangre suficiente para el proceso. Luego de hacerse la muestra, debe esperar unos minutos a ser llamado.
Si en la muestra todo sale bien, el documento de la evaluación se lleva al área de donación, se llena la bolsa junto a sus datos y se llama desde la sala de espera, se le pide su nombre y cédula para certificar que es la misma persona, y se comienza a llenar la bolsa de sangre, lo cual toma menos de diez minutos.
Concluida esta parte, se le hace entrega de un papel, el cual es el que certifica que se realizó la donación, y sin éste no se da la sangre.
UN DETALLE CLAVE ¿Qué pasa con la sangre donada? Está confirmado que la sangre del donante no es la misma que le entregarán a la persona, ya que esta sangre debe pasar por un proceso de análisis antes de ser despachada. Todo se basa en un círculo, se te entrega una pinta que se encuentra dentro del banco, ya analizada y estudiada, y se dona otra pinta para que pase por el mismo trayecto y se le entregue a alguien más. El donante no tiene que pertenecer obligatoriamente al mismo grupo sanguíneo, ya que esa sangre no será destinada a la persona.
Costos del proceso y requisitos del donante En el caso de contar con seguro Senasa, se les cobra RD$700 si es para clínica y RD$500 si es para hospital, estos 200 pesos de diferencia se debe a que, según Lucrecia, en los hospitales se hace el cruce y en las clínicas no.
Senasa subsidiado sólo cubre hospitales y en el contributivo sólo se pagan 500 pesos, este es el único seguro que tiene acuerdo con la Cruz Roja.
Si no se cuenta con seguro médico, se debe pagar RD$2,500 para hospitales y RD$2,700 en el caso de las clínicas.
Por ello, en este banco de sangre se encargan de realizar el proceso, que consiste en determinar si la sangre es compatible con la del familiar. Magdalena comentó que “si se va a donar o si se tiene una sangre, antes de entregarla, si en la clínica no se hace el cruce, se hace aquí”. Este dinero se utiliza para comprar los reactivos de las pruebas de tamizaje, y según refirió Magdalena, son 15 pruebas donde se encuentran las de Hepatitis B, VIH, Sífilis, entre otras, para determinar la calidad de la sangre.
Para ser donante La donación es gratis, pero se debe de estar completamente capacitado para poder llevarla a cabo. Magdalena Núñez afirmó que hay que encontrarse en buenas condiciones de salud y estar dentro del rango de 18 a 65 años de edad. Incluso, se puede ser donante a los 14 días de ser vacunado contra el Covid-19.
Cierta cantidad de personas considera que las mujeres no pueden donar a causa del periodo menstrual, pero Magdalena sostuvo que eso no es verídico. “Claramente, no pueden donar con la misma frecuencia que los hombres, pero sí se puede”, dijo. Los hombres tienen la capacidad de donar cada tres meses y las mujeres cada cuatro.
Luego que la sangre es tomada en una bolsa, se dirige a una nevera de la que no se ha procesado.