Vocación, pasión y algo de locura, requisitos para ser un bombero
El sonar de la alarma de color rojo, amarillo y de vez en cuando verde, son las señales para que un bombero sepa que su día inicia, una tarea en la que pone su vida en riesgo para salvaguardar la de los demás.
Con 93 años de fundación en el país, cuentan con la Virgen de las Mercedes como su santa patrona.
¨Para ser bombero hay que tener vocación, pasión y hasta un poco de locura¨, así describe el Jefe de Bomberos Luis Frómeta Herasme, su profesión.
No todos los equipos con los que cuentan son de última generación, pero hacen que la labor que desarrollan sea invaluable y de ayuda a la comunidad, quienes los han recibido con los brazos abiertos.
Cuentan con un equipo permanente de 262 hombres, 300 voluntarios y un grupo de 40 que ya está a punto de integrarse a ejercer el oficio, entre ellos el comunicador Enrique Quailey.
"La mayoría de los voluntarios no tienen necesidad económica, pero les mueve el don de ayudar al prójimo", expresó Frómeta Herasme.
Cuentan, además, con 24 unidades contraincendios, tres carros escalas, estos últimos donados por la ¨Brigada empresarial¨ la cual es comandada por Pepín Corripio y otros empresarios de la nación.
A su mando una sala de monitoreo para visualizar en tiempo real las unidades cuando se mueven en el transcurso de sus servicios, facilitando de esta forma el desplazamiento de los vehículos por la ciudad.
Enseñando lleno de orgullo las hazañas de él y su equipo, dice que esto más que una profesión es su vida, y el cuartel su familia.
El General Luis Frómeta Herasme, tiene una buena relación con su personal, que cuando él se les más que un jefe, lo ven como su guía.
Entre sonrisas y carcajadas, el jefe de bomberos relata: ¨Nosotros somos los chicos buenos de las películas¨, a esto le agregó que la vocación de servicio y estar presente las 24 horas del día para suplir esa ayuda es algo que no tiene precio.
En sus instalaciones tienen módulos médicos y odontológicos, botica popular, banda de música y comedores.
En un simulacro, se observó cómo dos jóvenes bomberos se preparaban para ir a sofocar un incendio, ponerse el uniforme, lanzarse por el tubo, recibir órdenes y luego salir a cumplir su misión de extinguir el siniestro.
Los bomberos no son solo fuego
Desde escuadrones apícolas hasta rescate de animales atascados en árboles, forman parte de sus tareas.
¨Los bomberos hemos ido acaparando otras ramas, ya no solo apagamos el fuego, también bajamos los gatos de enramadas y supervisamos que los locales tengan los protocolos necesarios contra incendios¨, declaró Frómeta Herasme.
Entre sus más aclamados miembros se encuentra el ¨Equipo Hurón¨, que se encarga de realizar rescate en catástrofes e incluso fueron a dar soporte en el terremoto de Haití.
Falta de personal
En general comenta que en la actualidad hay una gran masa de alistados desertores, con espacio para 60 bomberos faltantes y sin aspirante a dichos cargos.
¨Reconozco que es una labor muy difícil, dejar tu familia y poner en riego tu vida¨, acotó Frómeta Herasme.
