Una Policía Nacional "arrabalizada y abandonada por el Estado", una de las conclusiones de la comisión de reforma
Encontraron múltiples falencias dentro de la institución castrense.
“La institución la han arrabalizado; el Estado la descuidó”, así se refirió Servio Tulio Castaños Guzmán sobre la situación de la Policía Nacional tras resumir lo encontrado por el grupo de trabajo para la transformación y profesionalización de la institución castrense.
Durante la presentación del informe final, Castaños Guzmán puntualizó los problemas encontrados y las posibles soluciones que recomienda el grupo al gobierno.
En lo que respecta a los problemas, el coordinador del grupo indicó situaciones como la falta de recursos; formación académica y procedimental deficiente; “centralismo excesivo” de la actuación policial; necesidad de fortalecimiento de la carrera política, falta de equipos, entre otros.
En ese sentido, puntualizó que todas estas problemáticas se traducen en una carencia de condiciones laborales dignas del policía.
“La urgencia es de mejorar las condiciones de trabajo de nuestros policías, esto abarca infraestructura, equipamiento, lo relativo al salario retributivo y a las pensiones”, puntualizó.
Sobre las recomendaciones, Castaños Guzmán estableció la necesidad de una reforma integral y multidimensional “que permitan muchas cosas como capacitar a su personal en una nueva doctrina, fortalecer su equipamiento y mecanismo de inteligencia de modo que avancemos hacia un modelo que garantice la seguridad ciudadana”.
Puntualmente, también se refirió a la reorientación de la educación policial, la adquisición de nuevas herramientas “coherentes a los nuevos tiempos” y, para un punto importante es la constitución de un fideicomiso.
“Se recomendó la constitución de un fideicomiso para realizar y administrar las inversiones en infraestructuras, equipos de transporte, tecnológicos, licenciamientos y mantenimiento de software y equipos de comunicación”, detalló.
“Entendemos que el interés mostrado desde el Estado debe abocarse la continuidad de este proceso hasta lograr una verdadera materialización de la reforma policial de cara a la imperante necesidad de enfrentar la problemática de la inseguridad ciudadana ante el recrudecimiento de actos delictivos y una latente sensación de inseguridad generalizado”, concluyó Castaños Guzmán.