Sector Salud

Jóvenes sufren cada vez más afecciones cardiológicas

El Distrito Nacional, provincia Santo Domingo, La Romana, Santiago y Puerto Plata son los territorios con mayor número de nuevos casos ayer.

Lourdes AponteSanto Domingo, RD

La hipertensión arterial, el colesterol, obstrucción arterial y por sobre todo el estrés, son los factores que están contribuyendo a que más personas desarrollen cuadros de enfermedades que ponen en peligro la vida, afirmó ayer el doctor Pedro Corniel, subdirector del Departamento de Cardiología del Instituto Dominicano de Cardiología.

El especialista subrayó que condiciones genéticas y ese cuadro de vida es lo que explica que cada día gran cantidad de personas jóvenes estén presentando enfermedades cardiacas o muriendo de forma fulminante sin razones aparentes.

“El aumento de las personas que a temprana edad presentan condiciones cardíacas, confirma que el estilo de vida y la genética familiar van de la mano”, sostuvo el doctor Cornielle, quien recomendó rodear la vida con “una buena alimentación y ejercicios”.

“El corazón es el órgano que le da vida al cuerpo entero. La función principal de este es recibir la sangre del cuerpo, para enviarla a los pulmones, donde se va a oxigenar y regenerar la respiración”, explicó el experto.

Según el galeno, no se debe reconstruir el pasado, porque “desde las condiciones de salud de nuestros antepasados podemos saber qué cosas nos podrían afectar en el futuro”, apuntó el doctor Corniel.

“La historia clínica familiar no se puede borrar, pero la suma del estilo de vida y en qué condiciones se encuentra el paciente viviendo, crearía otras variaciones en la salud”, agregó Corniel.

Expresó que la hipertensión arterial, el colesterol, la obstrucción arterial y por sobre todo el estrés, son de los factores principales que se combinan para presentar estas situaciones en una etapa tan prematura de la vida.

“Todas esas enfermedades que yo le menciono reducen la expectativa de vida en la población, no solo dominicana, eso es algo a nivel global. También se agregan los factores psicológicos que es algo que en este tiempo, del 100% de los jóvenes, por lo menos un 60% de estos, padecen de alguna. También la ausencia de mamá o papá, ya sea por muerte o conflicto, genera desequilibrio emocional que puede tornarse en una enfermedad”, puntualizó el especialista en cardiología.

Llamado al gobierno El doctor Corniel lamentó que los trabajos en las estructuras físicas del Instituto Dominicano de Cardiología aun estén paralizadas desde que se instaló el nuevo gobierno el 16 de agosto de 2020.

“Desde hace muchos años hemos abogado por ampliar las instalaciones, para brindar un servicio más completo a nuestros pacientes. Sabemos que la pandemia ha afectado diferentes áreas de la salud, desde la parte externa de las consultas hasta los procesos quirúrgicos”, explicó Corniel.

La construcción comenzó en el año 2019 y a la fecha se encuentra parada por falta de recursos económicos. “Los Ríos”, como es conocido el hospital del Instituto Dominicano de Cardiología, es una entidad sin fines de lucro, en la que miles de dominicanos van a consultar y a realizarse procesos relacionados con cardiología, nefrología y diabetes, entre otras especialidades.

El especialista llamó al gobierno a que retome la obra, porque a su juicio “sería una gran aporte a la nación. Aquí en su mayoría viene la gente de la masa pobre, esto ha de ser una gran contribución a la clase cardiológica del país”, expresó Corniel.

Ante los reclamos de los pacientes por las incomodidables que soportan, Corniel dijo que “es una queja bastante justificada y por eso estamos batallando por expandir nuestro espacio, ya que a diario se atiende el triple de los pacientes para los cuales estamos preparados. Nuestro deseo es que la espera fuera sentados y no de pie”, agregó.

Claves Los pacientes A las afueras los pacientes se quejaban de las largas horas de espera y la lejanía de las citas para consulta, algunas teniendo fecha hasta de 8 meses de distancia.

“Estoy aquí desde las 4:00 de la mañana para poder tocar (conseguir) un turno. Ando con mi mamá para realizarle unos análisis y no me llaman”, añadió Altagracia, sentada en el contén a las afueras del hospital.

Doble esfuerzo: médico y enfermo “Aquí los médicos son muy buenos, pero para que a uno lo atiendan es un proceso. A veces han hasta atracado pacientes en las cercanías de aquí, porque se debe amanecer para poder llegar a ver el doctor”, afirmó Adán Pérez.