Ministro de defensa considera mujer ha logrado grandes avances en campo militar a nivel mundial

El teniente general, ERD, Carlos Luciano Díaz Morfa, giró una breve visita a Miami para participar en el acto de traspaso de mando del Comando Sur en Doral, representando a la República Dominicana y donde coincidió con ministros y militares de otros países. El acto fue encabezado por el jefe del Pentágono de los Estados Unidos.

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Rose Mary SantanaDoral, Florida

El ministro de defensa de la República Dominicana, teniente general ERD, Carlos Luciano Díaz Morfa, consideró que la mujer ha logrado grandes avances en el campo militar profesional a nivel mundial, permitiéndole ocupar posiciones cimeras en diversas estructuras de países de América Latina y el Caribe, siendo además Estados Unidos referente en este orden y otorgando por igual que estos países, grandes oportunidades para las profesionales militares.

Poniendo como ejemplo que, “por primera vez en la historia del Comando Sur de los Estados Unidos, una mujer asumió las funciones de jefa de la entidad”, Díaz Morfa, quien acudió representando la República Dominicana en esta ceremonia presidida por el jefe del Pentágono, general del Ejército de los Estados Unidos, Mark A. Milley y el secretario de defensa, honorable Lloyd J. Austin, mostró regocijo por ello.

El ministro de defensa de la República Dominicana felicitó a la nueva jefa del Comando Sur, teniente general del Ejército, Laura J. Richardson, quien pasa a la historia en este orden, tras asumir el alto cargo militar, en la institución creada en el año 1963, entre cuya misión está además de enfrentar los desafíos hemisféricos en el orden de respeto a la democracia, lucha contra el terrorismo, asistencia humanitaria, luchar también contra los avances de la criminalidad y el narcotráfico, con sus países socios, entre los cuales figuran la República Dominicana.

Díaz Morfa además resaltó las buenas relaciones bilaterales existentes entre República Dominicana y Estados Unidos en el ámbito militar y otros, las que han permitido desarrollo de agenda de cooperación conjunta para enfrentar desastres naturales en la región y crisis sanitaria como la de esta pandemia causada por el COVID-19, entre otros.

Igualmente, se destaca como parte de ello, la colaboración mutua en el tema educativo profesional, fortaleciendo y capacitando las diferentes estructuras militares, contribuyendo con desarrollo y políticas de modernización acordes con los avances regionales en diferentes áreas y que, a la vez, permite enfrentar juntos desafíos globales en diversos aspectos, entre ellos seguridad hemisférica, entre otros no menos importantes, como son combate al narcotráfico y delitos comunes para las dos naciones.

El teniente general ERD, Carlos Luciano Díaz Morfa, estuvo acompañado de su esposa, la presidenta de la Asociación de Oficiales de las Fuerzas Armadas, ADEOFA, Wendy Santos de Díaz, el coronel ERD, Gil y el teniente FAD, Payan Aquino.

Se destacó también la presencia del coronel de Defensa Aérea, Edgar Tiburcio, reconocido militar dominicano, enlace entre el país y la Fuerza de Tarea Conjunta Interagencial Sur de los Estados Unidos con sede en Key West, JIATF, como también la presencia de la exembajadora de Estados Unidos en República Dominicana, Robin S. Bernstein y su esposo Richard Bernstein, la concejal de Doral, Digna Cabral, quien se convertirá en noviembre en primera vicealcaldesa dominicana en esta municipalidad, entre otras personalidades.

Acto

La ceremonia de traspaso de mando quedó marcada por las emotivas palabras del jefe saliente en el Comando Sur, almirante Craig S. Faller, quien entregó el mando a la nueva jefa, la teniente general del Ejército, Laura J. Richardson, en presencia del secretario de defensa de los Estados Unidos, el Honorable Lloyd J. Austin III y el general del Ejército de los Estados Unidos, Mark A. Milley, jefe del Pentágono.

Faller se despidió de la carrera tras 38 años en ejercicio. Pasó el mando por primera vez a una mujer dentro de las filas del Comando Sur. Su esposa Martha Faller, interpretó majestuosamente “God Bless America”, generando fuertes aplausos y ovaciones. Ambos fueron reconocidos por parte de Comando Sur.

Tanto el jefe del Pentágono, general Milley como el secretario de defensa de los Estados Unidos, Honorable Lloyd J. Austin III, destacaron el rol del Comando Sur y los militares del país, no solo durante la pandemia del COVID-19, sino además en defensa de los Estados Unidos y cumpliendo con su juramento militar.

Sobre la primera mujer que asume el Comando Sur de los Estados Unidos, Austin III, ambos altos jefes indicaron que, “ella no solo hace historia en la institución encargada de cooperar con temas de seguridad con los gobiernos de Latinoamérica y el Caribe, sino que abría las puertas para otras mujeres en este cargo.”

La teniente general del Ejército de los Estados Unidos, Laura J. Richardson, a su vez, ratificó su compromiso de enfrentar los desafíos comunes en la región con los socios aliados del Comando Sur y los Estados Unidos.

La generala de cuatro estrellas y más de 35 años en el Ejército, se mostró optimista de las alianzas que deja Faller con los países de la región caribeña y latinoamericana, entre las que se incluye la República Dominicana.

Breve sobre la generala Laura J. Richardson

La ahora comandante del Comando Sur de los Estados Unidos, teniente general Laura J. Richardson creció en Colorado y fue nombrada Subteniente de Aviación después de graduarse de Metropolitan State College en Denver. Tiene una hoja de servicios intachable y cuenta con una capacidad profesional marcada por su trayectoria militar.

Su primera asignación después de la escuela de vuelo fue en Corea con la 17ª Brigada de Aviación, donde se desempeñó como líder de pelotón, oficial ejecutiva de la compañía, oficial de personal de brigada y comandante de la compañía.

Luego sirvió en Fort Hood, Texas, en el personal del III Cuerpo y en la 6ª Brigada de Caballería como comandante de Compañía y Ayudante de Brigada.

Al salir de Texas, fue asignada al Programa de Entrenamiento de Comando de Batalla en Fort Leavenworth, Kansas como entrenadora de observadores y luego asistió a la Escuela de Comando y Estado Mayor del Ejército de los Estados Unidos.

Sirvió en Fort Campbell, Kentucky como Oficial de Operaciones del Batallón de Helicópteros de Asalto y Oficial Ejecutiva con el 9º Batallón, 101º Regimiento de Aviación, 101ª División Aerotransportada (Asalto Aéreo).

Richardson fue seleccionado para servir como asistente militar del vicepresidente en la Casa Blanca en Washington, DC Regresó a Fort Campbell para servir como subdirectora de División G-3 de la 101 División Aerotransportada (Asalto Aéreo) y luego comandó el 5to Batallón, 101o Regimiento de Aviación y desplegado en Irak en apoyo de la Operación LIBERTAD IRAQUÍ.

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